sábado, 29 de enero de 2011

ATENAS CON NIÑOS (Segunda parte)

Como escribía, Atenas se puede disfrutar en tres días. Lo más interesante de ver está bastante concentrado en el recinto de la Atenas clásica y, si se quiere dar un paseo hasta el Pireo por ejemplo, con tomar el metro en Monastiraki estás en 10 minutos con el mismo billete.
A mí, personalmente, el Pireo no me gustó. La linde del puerto la ocupan decenas de restaurantes con la terraza en el muelle que hacen que si quieres pasear por allí, o entras a comer (A precios de París, por cierto), o paseas por la calle interior desde donde solo ves las entradas de los restaurantes.

Cuando visito un sitio histórico, en el que sucedieron cosas importantes, me traslado en el tiempo, y me imagino las escenas que allí tuvieron lugar. No solo disfruto de los pedrolos. Y eso es lo que me pasó en el Agora, o foro Ateniense, mercado y plaza pública, allá donde Aristóteles, Socrates y Platón enseñaron a sus discípulos.

El Agora es un recinto para pasear a los pies de la Akrópolis. Frondoso y verde es una delicia pasar el tiempo allí. Muchos edificios de los que solo sobresalen los pilares, pero otros como el Templo de Hefesto que se conserva en su integridad. Pasear por allí es una maravilla intentando imaginarnos la vida hace 25 siglos.

La colina desde la que mejor vista se tiene del Agora es el Areópago. Peñasco donde se reunía el Consejo de Atenas. Tambien fue allí donde San Pablo convirtió a los primeros atenienses.

Si antes de viajar no leyese un poco, me perdería más de la mitad de la diversión porque, las razones del disfrute, muchas veces están en tu cabeza en vez de en el mundo exterior.

Muy cercano se encuentra el recinto del Keramikos. ¡No confundir con la estación de Metro de Keramikos! donde están las antiguas murallas de Atenas y su cementerio. Un lugar, aunque olvidado por los turistas, absolutamente delicioso, con tumbas de personajes ilustres, con más de 2000 años de existencia, los caminos sagrados por los que procesionaban sacerdotes y vestales. Espectacular, en resumen.

Hacia la Plaza Sintagma se encuentra el Arco de Adriano y uno de los monumentos que más me gustó, el Templo de Zeus Olímpico.

Columnas de 17 metros absolutamente imponentes circundando un recinto desde el que se tiene una vista maravillosa de la Akrópolis.

Una de estas columnas fue derribada por un ciclón en 1852, y todavía se encuentra como cayó. Es llamativo como podían construir en esas épocas, pilares tan majestuosos.

De Atenas queda todavía un montón, aunque no pretendo convertir esta entrada en una guía. El Agora romana, con su Torre de los Vientos y las letrinas públicas, ciertamente curiosas (Algunas cosas no cambian con los....siglos, jejeej), el Estadio Olímpico, hoy reformado, el Cambio de Guardia en el Parlamento (Menudos bigardos, jejeje. Yo mido 1,82...atentos al Angelito que está al lado mío) y paseos por sus calles y plazas, tanto de día como, espectacular,...de noche.

Sé que estais esperando que os hable del condumio, jejeje.

Pues muy bien, incluso en los sitios que me hubieran hecho desconfiar. Los niños se empeñaron en comer en una calle llena de restaurantes para guiris, y el tzatziki que probamos, entre otras cosas, como una ensalada griega con queso feta, fue francamente espectacular. Allí me metí unos tragos de ouzo. Dado que no me gustan los anisados no le saqué la gracia, pero no puedes ir a Grecia y no visitar Atenas...ni probar este licor.

Sin embargo, al día siguiente, comimos en una taberna una variedad de mezes (Creo que en el menú entraban unos 15 platos diferentes) de las que todavía nos estamos acordando.

Como os comentaba en la otra entrada, Atenas, fuera de temporada, absolutamente recomendable

¡Y los niños vinieron pidiendo más!

martes, 25 de enero de 2011

SUIZA YA NO ES LO QUE ERA

Esta semana tenemos la reunión de comienzo de año. La verdad, en tiempo de estrecheces y de nuevas tecnologías, donde nos aprietan por todos los lados, no acabo de entender muy bien el movilizar a 100 personas de una compañía, desde 3 continentes, a un lugar remoto de Francia, para vernos las caras y que nos cuenten lo que ya sabemos. Sin embargo forma parte de la cultura de la empresa y, como tal, lo tomo.

Aterrizaba esta mañana en Ginebra con dos compañeros. Nos teníamos que desplazar a una estación de esquí en la frontera, del lado francés. Había alquilado un coche en el Aeropuerto.

Para llegar al aparcamiento de coches de alquiler del aeropuerto de Ginebra hay que tomar un bus lanzadera (Eso que los pijos llaman shuttle y que si te pillan despistado te parece que te vas a montar en un cohete)

El conductor del autobús metia las maletas en el maletero. A su lado un reloj indicando que ese autobús saldría en 2 minutos cuarenta y tres segundos.

Entramos en el bus, el conductor se puso a hablar con un compañero.

Con incredulidad e impaciencia veíamos como el reloj continuaba su cuenta atrás mientras el conductor no hacía ademan de montarse.

Faltaban 15 segundos para la hora. Comenzábamos a sentir angustia ante lo que sabíamos que podía pasar.

Llegó el momento en el que el desastre era inevitable. Cuando faltaban 3 segundos, el conductor montó, no le dio tiempo a arrancar antes de que el reloj llegase a cero.

Cinco segundos después, una vez que el mito se había derrumbado, arrancó. Recorridos tres metros, salió una señora corriendo. El conductor paró, por supuesto fuera de las líneas que indicaban la parada. La debacle absoluta e irremediable

Si así está Suiza, ¿Cómo quieren los europeos que España levante cabeza?

Y es que, desde que se inventaron los relojes de cuarzo, Suiza ya no es lo que era. Parece Camerún.

domingo, 23 de enero de 2011

ATENAS CON NIÑOS (Primera parte)

Hay principalmente tres paises que los niños tenían unas ganas locas de ir; Grecia, Egipto y China.

Siempre he pensado que hacer que los niños viajen les airea la pelota un montón. No hay problema para hacer un viaje largo, como mínimo, una vez al año. Si además ellos disfrutan, como es el caso...mejor

Porque veo padres de adolescentes intentando interesar a sus hijos en detalles cuando viajan, y las jetas de infinita paciencia de esos adolescentes, que cuando me ocurra a mí, los embarco en el primer avión y que se jodan.

O sea, que sí, que soy un afortunado, porque no solo disfrutan, sino que además se les nota y el ambiente es buenísimo. Disfruto un montón.

Alguien me dijo una vez que no entendía cómo, con lo que viajo, cuando tengo vacaciones no me quedo en casa. Y podría darle la razón, si no fuese porque viajar todos juntos es algo que me entretiene muchísimo.

Este año Egipto tenía todas las papeletas, pero solo encontramos billete de vuelta (A ver cómo cojones llegábamos), con lo que rapidamente cambiamos el destino. A todos nos gusta ver piedras. A todos nos gusta comer bien. ¡A todos nos tenía que gustar Atenas!

Primer consejo...si lo que os gusta no es torraros al sol y no vais buscando un crucero para bañaros mucho, enero es un mes cojonudo para visitar Atenas. No hay gente, te atienden bien en todos los sitios, estás sin agobios.

¿Cuantos días para ver bien Atenas con niños, relajadamente, sin parecer un touroperador Japonés? Tres. Te da tiempo a ver absolutamente todo lo importante (Y lo no importante, no nos volvamos locos), sin ir con la lengua fuera todo el día.

Para llegar a Atenas desde el Aeropuerto, buscad un hotel cerca de la Plaza Sintagma o en las cercanías de la línea 2 de Metro. Es directo, razonablemente barato y cómodo.

Nos alojamos en Megaro Moussikis, que es uno de los mejores barrios de Atenas, a dos paradas de metro de Sintagma. Los billetes de metro cuestan 1 €, los niños hasta 18 años, la mitad. El abono de 7 días 10 napos para cada uno. No interesa sacar abono para los niños...en una semana no haces 20 trayectos en metro ni siendo el conductor (El trayecto al Aeropuerto es aparte)

Nada más llegar, Carmen quería comer en Plaka, el barrio que rodea a la Akrópolis. Primer error, se tiró en plancha a la recepcionista del hotel quien nos recomendó un restaurante con música. Solo advertí, "no queremos un restaurante para turistas". La recepcionista me contestó, "no sólo hay turistas...."

Efectivamente, los camareros eran locales. Nos dieron hasta en el carnet de identidad por una comanda infame. Me acabé de cabrear cuando quise pagar con VISA y, pese a la pegatina de la entrada, me contestaron que casualmente ese día, no les funcionaba.

Me quedé mirando al pavo decidiendo si le comentaba que no tenía nada más que la tarjeta, a ver si comenzaba a funcionar de repente el datáfono. Vi tres pares de ojos que me escrutaban y me tragué mi orgullo. Efectivamente, no era "solo para turistas", era para "turistas pringaos"

Cuando viajas con niños, los horarios los marcan los mayores, hasta ahí podíamos llegar, pero la disciplina hay que relajarla.

LLegábamos a la Akrópolis al día siguiente sobre las 11 (Nada de eso que te cuentan en las guías de las 8 de la mañana para evitar los grupos en verano). La entrada son 12 €, pero con esta entrada se puede visitar todo lo que en Atenas es de interés menos el Museo de la Akrópolis. Hasta los 18 años no se paga. Se me ocurren muchos adjetivos en vez de caro para esto.

La impresión que me produjo el estar ahí, sin mucha gente, con tiempo para observarlo todo y la cantidad justa de asiáticos por metro cuadrado, fue fabulosa. La Akrópolis es una maravilla, sé que soy original en mis apreciaciones. Sin embargo, las restauraciones que están teniendo lugar no me satisfacen, acaban pareciendo de cartón-piedra.

Un Monstruo el Conde de Elgin quien se llevó la mayor parte de los frisos del Partenón (Desde luego, los mejor conservados) a Londres, y unos monstruos los británicos que aun hoy defienden su derecho a conservar estos monumentos. La próxima cena de amigotes la hacemos en Londres y nos traemos el Big Ben.

La sensación de ir paseando en un entorno existente hace 3000 años a mí, por lo menos, me impresiona. Nada que ver con ese amigo, bruto él, quien me dijo que ahí no había ruinas, que solo había escombros.

En las faldas de la Akrópolis se encuentran los teatros de Herodes Atico y de Dionysos, y el Barrio de Plaka. No me quiero ni imaginar estas callejuelas en mitad de Agosto. Debo de parecer raro en mi entorno, pero a mí, eso de que me guste disfrutar de las cosas sin estar en medio de un rebaño, no me parece nada extraño sino al contrario. Tendré que hacérmelo mirar.

Era lunes. El Museo de la Akrópolis se encuentra enfrente del teatro de Dionysos. Sospechoso no ver gente. ¡Ah! ¡Que los lunes cierran!

Paseando por Plaka y Monastiraki, encontramos la Biblioteca de Adriano, otro de los recintos donde sirve la entrada única. Supongo que habrá gente que esto no le diga nada. Todos nosotros disfrutamos como enanos del entorno y de la tranquilidad. Insisto que pasear por aquí en rebaño no debe de ser lo mismo, ni mucho menos.

Me habían hablado de un restaurante cerca de Monastiraki. Cuando llegamos nos encontramos con un edificio abandonado. La suerte fue que estábamos al lado del Mercado. ¿Alguien ha comido mal cerca de un mercado?

¡Como nos pusimos por 30 €! No recuerdo lo que tomaron los demás. Yo, Souvlaki de cordero, con un vino muy decente y Tzatziki, que es una salsa de yogur con ajo, pepino, aceite, vinagre y el secreto de cada cocinero. Acabamos con un café turco, griego le llaman ellos

En invierno, las piedras las cierran a las 15, 30, o sea que la tarde es para empaparte de Atenas, ver sus calles, vivirlas, encontrarte con esas Iglesias bizantinas en cualquier esquina y disfrutar de la tranquilidad de los rincones y las calles en cuanto te alejas doscientos metros de la parte turística.

Por supuesto, algo que no os podeis perder es subir al Monte Lycabetos en el funicular. Es caro de narices, pero la vista de Atenas y, sobre todo, de la Akrópolis iluminada, merece la pena. Eso sí, si haceis como nosotros que, hasta llegar al funicular fuimos andando, el paseito es curioso. Hacía un frío de pelotas, pero, otra vez, no había nadie, y la posibilidad de disfrutar a tus anchas del entorno, no se paga.

Nos quedaban unos cuantos días. El aperitivo había sido espectacular, pero todos estaban cansados como para continuar. En según qué circunstancias, no hay que abusar

martes, 18 de enero de 2011

EFECTIVAMENTE, ME HE HECHO MAYOR

Y no es porque para leer letras pequeñas necesite levantarme las gafas porque si no, no distingo nada.

Tampoco es porque me haya estabilizado en los 88 kilos, y que haga lo que haga no los baje.

Nada tiene que ver que el continente de esos 88 kilos sea una barriguilla infame que no se va ni aunque no coma en cuatro días.

Por supuesto, es una falacia que sea porque tengo una hija de 15 años que cada día me muestra que el tiempo pasa volando.

No es cierto que sea porque tengo pelo en todos los sitios que no debiese (Nariz, orejas, hombros, manos) aunque mi legendario flequillo se fuese a por tabaco hace años y no volviese (Supongo que adivinó la que se venía encima a los fumadores)

Falso el achacarlo a las canas que protagonizan la superficie pilosa, sea la que sea, que me adorna.

Aunque creais que sí, tampoco es por cambiar aquello de 7 a la semana por uno cada siete semanas (si llega)

Son habladurías el responsabilizar de este hecho a darte cuenta que te duelen huesos que nunca pensases que existiesen, despues de un partidillo de rugby

Una leyenda urbana, el que una prueba de ello sea el nivel de mi ácido úrico.

No estoy de acuerdo con el Jevi en que sea porque en esta etapa de la vida, las dos palabras más importantes que existen para mí, en vez de "te quiero", sean "es benigno"

Que Malvi crea que tengo la edad de sus padres tampoco es importante para esta demostración

Una frusleria el pensar que es porque ahora, si te tomas la décima parte de las copas que te tomabas cuando eras un tierno infante, acabas ocho veces peor (Aunque la calidad de las mismas nada tenga que ver con las de antes)

Que absolutamente toda la gente que te para por la calle te trate de usted, es una bobada para el tema que nos ocupa

No tiene ninguna importancia que las batallas de las que me rio con mis amigos hayan ocurrido, como mínimo, hace veinte años.

No. No me he dado cuenta de que me he hecho mayor por nada de eso, sino por algo infinitamente más importante.

Porque este invierno he comenzado, por primera vez en mi vida, a dormir con pijama. Y lo más indignante es que estoy tan a gustito.

Y es que jode darte cuenta de que ya no eres un chaval...

jueves, 13 de enero de 2011

COSAS CHINAS

Que no es lo mismo que Cochinas, antes de que Leyre me demande por insultar ;-)

Sabeis que despues de las 50 veces que he ido a China y alrededores, todavía hay cosas que me sorprenden. La extraña manera que tienen los chinos de felicitarse el año nuevo, por ejemplo.
A aquellos que vayais a emparejaros con un chino (O china, no se me cabree Bibi) habeis de saber que si vais a ventilar la casa, nunca se os ha de ocurrir abrir las ventanas, no me seais brutos. La casa se ventila abriendo la puerta, porque si abres la ventana por ahí se escapa el dinero...
Al alojaros en un hotel, no creais que os habeis confundido cuando en el ascensor no haya más de 7 pisos si el número de la habitación comienza por 8. Es casi más seguro dirigirse al piso del segundo número. El 8 es un número de la buena suerte y, sobre todo en hoteles para chinos, es muy habitual que todas las habitaciones comiencen por 8. Por supuesto, la hab 8888 tiene un precio muy superior a los demás ¡A ver qué os habíais pensado!
Los que vayais a presentar una oferta en China con un socio chino...no os extrañe si para cerrar el precio final, el chino de marras se trae un adivino para marcar "el precio de la suerte" (Que casualmente, siempre acaba en 8 y es más barato que el que tú habías pensado, que una cosa es buscar la suerte y otra tentarla, jejeje).
En las oficinas chinas es muy habitual que existan grandes peceras. Siempre con "peces de la buena suerte", no pensemos que eso es decorativo.
Cuidado si, en la China profunda, os quedais sin dinero y solo disponeis de la VISA.
¡Precaución si te invitan a beber! ¡Piénsatelo dos veces antes de dar un beso a una Chica china en público! (No conozco las consecuencias de besar a chicos chinos, disculpad mi falta de experiencia) ;-)
Cuando se os duerman en una reunión...no os lo tomeis como algo personal. Si te montan un bingo en un avión relájate y disfruta del espectáculo (Bueno...esto Ryanair ya lo hace por aquí tambien)
Por supuesto, mucho cuidado si os quieren llevar a un karaoke, otro tanto si necesitais cortaros el pelo a altas horas de la noche. No os desespereis si os apetece una cerveza
Si tienes despacho en China y te das cuenta de que nadie quiere reunirse contigo ahí dentro...ojito, no sea que hayas puesto la mesa al lado de la ventana para que entre la luz del sol, pero no hayas seguido los preceptos del Feng Shui, y estés cargando de energía negativa la habitación. No me lo han contado. He visto derribar hoteles de más de 10 plantas diseñados por occidentales, porque la puerta de entrada se situaba en la Calle Principal de la manzana y, por ello, no seguía estos preceptos...¡y no se alojaba nadie!
Lo mejor de estas cosas es que te las cuentan y...como te les quedas mirando con cara de gilipollas...pues piensan que tienes cara de gilipollas....
Yo creía que ya había visto (y sabido) de todo, pero no dejo de sorprenderme...
Mi cumpleaños es uno de estos días. No incidiré en el tema que un hombre, y más de mi edad, ha de tener algún secreto, ¿Verdad Malvi?
Low Siew Fung, la Ingeniera de mi cliente en Singapur, me comentó en su día que yo era conejo. La verdad, siempre me dió igual, pero ella me lo dijo muy seria para describir mi manera de ser, mis defectos, mis virtudes o mis capacidades...
No es que Low Siew Fung me lo dijera. Cuando comencé a trabajar con mi Ingeniera favorita en China, Wu Lan, ella me hizo los mismos comentarios. Cosas de chinos, pensé...
El otro día, mi cumpleaños, Wu Lan entró como una exhalación en mi skipe para felicitarme. Me hizo saber que, como soy conejo y éste es el año del conejo, era mi año de la suerte (Dado que se encontraba con un jet lag de caballo porque me escribía desde Estados Unidos, creo que, debido a la diferencia entre el año lunar y nuestro calendario, a mí me corresponde el año que viene, pero este detalle nada tiene que ver con lo que me comentó a continuación) A propósito, Malvi....ya más detalles es imposible que te dé. El próximo es una digitalización de mi DNI (Por la parte de atrás, claro está ;-) )
Incluso para una ingeniera excelente como Wu Lan, esto es más científico que el número Pi, así que le seguí la corriente como siempre, no se me fuera a cabrear. Al preguntarle qué debía de hacer, me comentó que una gran celebración para buscar la suerte y, además, debía de ponerme un cinturón rojo para ahuyentar los malos presagios
¡Un cinturón rojo! ¡Lo que me faltaba! Debería saber que tengo una reputación....
Por supuesto, cuando se lo dije a Carmen, le faltó tiempo para montarme un sarao de pelotas y, sobre todo, encontrar el cinturón rojo más feo que he visto en mi vida (Según ella, con la que está cayendo, no es cuestión de tentar a la suerte. Si te lo cuentan y encima pasa algo, la cara que se te queda es bastante peor). Os ahorraré la foto con el cinturón, no quiero ser cruel.
Joder....¡Menos mal que Wu Lan no dijo unas bragas!

sábado, 8 de enero de 2011

UNA TARDE EN EL LOUVRE

Trabajo en una multinacional francesa dirigiendo la filial en España de una pequeñísima rama de su actividad. Todas las multinacionales son, al final, empresas que exportan los modos de hacer de su país de origen allá por donde se expanden.

O sea, que Telefónica en cualquier país, al final, no deja de ser una empresa española haciendo negocios en otro lado. Igual que Accenture, o la mía.

Es difícil estar en una empresa francesa sin hablar correctamente francés, cosa que no hablo ni de lejos...ni de cerca. Por mucho que me contaran al llegar, que su idioma de negocios es el inglés, solo tienes que ir a cualquier reunión para que a los cinco minutos, si se entra en cualquier polémica, te quedes en fuera de juego. Y no me quejo. Sé que es normal. Aunque ellos quisiesen, no es lo natural.

Entiendo el 80% del francés que me hablan. No soy capaz de hablar más de tres frases hechas, y me siento frustrado por la cantidad de años que estudié francés en mi niñez.

Los franceses son...franceses, pero no comen mal, aunque a todo le echen mantequilla. Además, el café es muy bueno. Es importante cuidar de según qué detalles cuando te vas a incorporar a un puesto de trabajo ;-)

Nuestra matriz se dedica a temas diversos, en todo el mundo. Los puestos de responsabilidad y las filiales de mi empresa las dirigen franceses. (Yo creo que menos en Alemania y España, todos lo son)

Esta Multinacional realiza programas de integración para que sus directivos entiendan la variedad de actividades que se realizan. Hasta ahora siempre se había hecho en francés. Alguien pensó que, debido a que más del 90% de los ingresos llegan desde fuera de Francia, a lo mejor no estaba mal realizar uno en Inglés.

De entre todos los que somos (33.000 en todo el mundo), yo fui uno de los 16 elegidos. No me hago muchas ilusiones. Supongo que porque les costaba sacar mucha gente que no supiese francés. Y eso que entre los 16 (Tres belgas, un canadiense, dos indios, un chino, uno de Singapur, tres alemanes, un venezolano, un inglés, un yanki, un australiano) cinco hablaban un correctísimo francés.

Nos tuvieron paseando por Francia la semana del Puente de la Inmaculada visitando fábricas, centros logísticos, centros de negocios, etc, creando una red de contactos.

En uno de los emplazamientos se empeñaron en que tenía me tenía que vestir de astronauta y cubrir mi cabeza para visitarla. Yo insisitía en que era más fácil que cayese algo del gorro que de mi cabeza, pero fueron inflexibles, jejeje

En todos estos txuntxunes, siempre hay una actividad de lo que se llama "team building" (Hacer equipo). En esta ocasión fue una visita al Louvre con guía.

En París había nevado. El día anterior nos cancelaron el avión de vuelta desde casadios, y nos costó 12 horas regresar a París en bus (Yo creía que la gente por ahí arriba estaba más preparada, pero no dejo de llevarme sorpresa tras sorpresa)

París amaneció nevado pero con un cielo radiante. Uno de esos cielos luminosos que en las afueras de Madrid disfrutamos tan a menudo. (En el centro, la contaminación no deja ver mucho cielo que digamos)

La visita al Louvre fue lo que se esperaba. Muy interesante. Nunca me canso de ver la Victoria de Samotracia, la Venus o la Gioconda, por decir lo que se espera que uno diga. Me gusta tambien observar las murallas del antiguo Louvre, o el arte egipcio, griego y romano. A todo esto se suma el tener a alguien explicándo, que te hace ver cosas que nunca antes habías reparado en ellas.

Sin embargo, en esta ocasión, lo que más me gustó, fue el atardecer desde la sala griega. Ahí los teneis, alineados, el Arco del Louvre, el del Triunfo, y el de la Defense, mientras el sol se va escondiendo.

Lástima que estos instantes sean eso...instantes

sábado, 1 de enero de 2011

UN RODIZIO EN RIO DE JANEIRO

Supongo que alguno pensará que soy un guiri de libro, pero cada vez que llego a Brasil me tiro en plancha a una churrascaria a meterme un rodizio, o varios, entre pecho y espalda.

Para los no iniciados, el rodizio es un menú muy habitual en Brasil que consiste en un buffet de ensaladas seguido de más de treinta tipos diferentes de carne (En muchos sitios, además, hay buffet de sushi, sashimi, maki, etc. No hay que olvidar que Sao Paulo, por ejemplo, concentra a la mayor cantidad de japoneses fuera del Japón, del mundo). El precio es fijo y hay que añadir las bebidas. ( Y el postre, si alguno quiere suicidarse de un reventón).

Solo con el buffet de ensaladas podríamos ir servidos. Sin embargo, una vez que ven que has acabado con la ensalada comienza un interminable rosario de camareros, cada uno con un tipo de carne diferente que te van ofreciendo hasta que te hartas.

En estos momentos, me acuerdo de Isidro Agirrebengoa, "El Apa", compañero de Colegio Mayor quien yo creo, podría hacer quebrar más de uno de estos establecimientos. Aquí te sirven hasta que no puedes más, y yo, al "Apa" nunca le ví no poder más, y eso que hubo ocasiones. Como aquella vez, que viniendo de ganar un campeonato de España de Rugby en Gijón, paramos a comer en un restaurante de un pueblo donde al entrar, la dueña nos dijo que nadie nunca se había logrado acabar su cocido. Cuando "el Apa" rebañaba la perola con la lengua, despues de haber repetido cuatro veces, la señora, henchida de satisfacción bien es cierto, nos dijo que ya nunca más podría decir lo mismo. Por supuesto, acabamos con un par de postres y un café con sobaos para desengrasar

Me disperso, para variar. Con el fin de orientar un poco el proceso y no tenerte todo el rato diciendo que sí o que no a los camareros, te facilitan un circulo de cartón. Un lado pintado de rojo y otro de verde. Así los camareros saben si dirigirse a ti o no. Aunque lleves un rato con el disco en rojo, lo puedes cambiar a verde cuando desees. Es una competición de resistencia, no de velocidad ;-)

Como os he comentado, hay más de treinta tipos de carne diferentes, aves, vacuno, cerdo, cordero.... Mi preferida es la Picanha, o solomillo. No he probado ni un solo Rodizio en el que la carne no estuviese en su punto (Lo siento, amigos argentinos). ;-)

Recuerdo un viaje en Sao Paulo donde debido a las reuniones no habíamos podido comer. Entramos en una Churrascaria a las 5 de la tarde...salimos a las diez y al llegar al hotel les tuve que pedir que me cambiasen mi cama por una de matrimonio, y no para hacer guarradas, jejje ;-)

Os voy a evitar las vueltas. Si vais a Rio, habeis de ir a la Churrascaria Porcao.

Porcao es una franquicia de churrascarias presente, que yo sepa, como mínimo en Rio y en Brasilia. En Rio tienen tres restaurantes. Yo he estado en el de Ipanema y en el de al lado del Aeropuerto Santos Dumont.

Sin ser barato, su relación calidad/precio es óptima.

Llegaba a Río el jueves 2 de Diciembre. Me alojaba, como siempre, en Ipanema. Siendo un clásico y apasionándome el vino, me encanta tomar rodizio con Caipirinha, y estoy esperando ya todos vuestros afilados cuchillos. La realidad es que será el ambiente, la humedad, o el calor, pero una caipirinha con esta carne en este sitio marida de cojones, que diría un pijo.

Y las Caipirinhas, varias, que me hizo el encargado en el Porcao de Ipanema son de lo mejor que he tomado en mi vida (Para los amigos, sabeis que en casa siempre tengo, como mínimo, una botella de Cachaça, por si ese día viene algún caprichoso con ganas de tocar las pelotas pidiendo algo difícil). Sabía donde iba y sabía lo que tenía que pedir, no en balde somos viejos conocidos.

Lo peor de esto es la soledad, y lo digo en serio. Un Rodizio es un acto social, y tomar un rodizio solo es algo parecido al onanismo. No hablaré con mi confesor por si me confirma que es pecado. Siempre mejor la ignorancia...

Al día siguiente tenía la mañana llena de reuniones. La última, acabó justo antes de almorzar con lo que invité a mis clientes. Ellos me sugirieron de ir a un sitio estupendo a tomar un buen Rodizio. Dado que el día anterior mi experiencia no había sido completa, (Me faltaba la agradable compañía) no dije que no. ¿Donde fuimos? ¡Bingo! Al Porcao al lado del Aeropuerto.

Y he de decir que, aunque mi ácido úrico lo sufra, podría ganar treinta kilos en dos semanas y no comer, ni beber otra cosa. Este Porcao, sin embargo, tiene la ventaja de poseer unas vistas absolutamente espectaculares, como veis, una vez acabada la pitanza, con el Pan de Azucar al fondo, o el Cristo de Corcovado en el horizonte.

Acepto invitaciones por la recomendación. Para mí, volver a Río, siempre es un auténtico placer.