viernes, 29 de abril de 2011

PERONISTA Y DE BOCA; JODÉTE (UNOS DIAS EN BUENOS AIRES)

Argentina es una de mis debilidades, y por eso la fustigo sin descanso. No se me ocurre, si ese país no fuera tan inmensamente rico, cómo podría aguantar el saqueo sistemático que sufre a cargo de la casta dirigente desde hace décadas, por no decir siglos. Argentina, en mi imaginario, no sale bien parada porque, generalmente, llego a ella procedente de Chile, y eso es el Ying y el Yang. Siempre lo he dicho, la quiero tanto...que me duele Argentina.

Aterrizaba en Buenos Aires hace unas semanas, un maravilloso día de otoño. El país soliviantado. Un Hijo de puta con todas las letras, un mafioso llamado Hugo Moyano, lider del sindicato de camioneros (Si alguien se pregunta por qué Argentina no tiene un ferrocarril que merezca ser llamado así, aquí puede investigar un ratito) acababa de dejar el país sin periódicos el fin de semana. ¿La razón? Los periódicos habian comenzado a informar acerca de una investigación judicial en Suiza sobre él (dinero limpio, no jodamos). Y como en Chicago años 20, en vez de defendernos de las insidias (coño, que es que a lo peor no tengo defensa posible), impedimos el reparto de prensa. (Esas cosas que solo pasan en Argentina y en Zimbawue, con perdón para los de Zimbawue).

Lo mejor...el Gobierno, aliado del mafioso, no interviene porque aduce que es un conflicto laboral. ¡Peronismo en vena!

Buenos Aires está sucio, muy sucio. Sigue siendo una ciudad maravillosa, pero la mierda parece que se regala.

Todos los taxistas, menos uno que ya contaré más adelante, quejándose del Gobierno. Y a todos les contestaba que cada pueblo tiene el Gobierno que se merece. Los españoles el nuestro, y Argentina...el suyo.

Con tanto sicoanalista por metro cuadrado, los argentinos se entretienen discutiendo si son galgos o podencos. La ciudad la bloquean diariamente 4 piquetes de 50 personas, no son más. Y hay enconados debates a favor de la libertad de expresión y contra la represión. O sea, que 200 personas bloquean a varios millones y la gente se busca sus atajos, todos quejándose de lo mismo pero nadie haciendo nada.

A pesar del Gobierno, hay crecimiento. (Principalmente gracias a las exportaciones de soja a China) Argentina es el único pais del mundo que tiene aranceles a la exportación en vez de a la importación, y los golfos del gobierno lo defienden como una ley contra los ricos. (Alfonso Guerra al lado de estos populistas, un niño de teta).

El problema es que en Argentina los Gobiernos no caen por otros problemas más que por la inflacción (Ni siquiera las dictaduras militares cayeron por otras cosas), y ya andamos entre el 30-40% anual.

Pero no hay que preocuparse. Volveremos a agitar el fantasma de Las Malvinas (Ya estaban empezando). El caso es señalar la luna con el dedo para que se te queden mirando al dedo. Y mientras tanto, los veteranos de la guerra, acampados en La Plaza de Mayo, esperando que les reconozcan sus derechos, 30 años despues.

Sin embargo disfruto, disfruto mucho allí. Una vez que eres capaz de aislarte del entorno, Buenos Aires es una ciudad maravillosa.

He comido una carne, pura mantequilla, lástima que la requemen (Me estoy haciendo hoy un montón de amigos, jejeej, porque hablar mal de Argentina no está bien, pero criticar el punto de la carne es delito de lesa patria). En contraposición diré que los cruasanes (Como dice la RAE), o medias lunas (Como dicen los argentinos), son los mejores del mundo. Por mucho francés con el que os relacioneis.

He paseado por Puerto Madero, delicioso. Anduve por Palermo, un Chueca porteño, con las tiendas de moda y gente guapa y moderna (homos y heteros). Recorrí el Mercado de San Telmo el domingo por la mañana, con todo el sabor maravilloso de la Argentina eterna, y, despues de muchos años...volví al Barrio de Boca.

Tomaba un taxi hacia allí. No recuerdo qué broma le gasté al conductor. Me contestó:

"Gallego, soy peronista y de Boca, jodéte" (Tilde puesta a propósito, aviso)

Pocas bromas, me dije, éste va cargado o forma parte de un piquete por las mañanas.

Al pasar delante del Estadio del Boca Juniors se vuelve a dirigir a mí;

"Gallego, persignáte". A ver como le decía al pavo que no me gustaba el futbol...

Por fin llegamos. Con un suspiro de alivio le pagué, y me reencontré con esa Argentina Porteña, encerrada en sí misma, aislada del mundo, porque no creen que el mundo esté a su altura.

El Barrio de Boca es un Barrio Popular. La gente vive allí, y se nota. Si sales de la parte turística, media docena de cuadras, es un sitio con sabor, pero decrépito. Guardian de las esencias de esa Argentina, autista y fullera, para la que todo lo de fuera es inferior. Gardel, Evita, Maradona... Pero, aunque solo sea por una vez, has de ir y disfrutarlo.

Una Quilmes de litro en la calle(Si eres turista no tienen menor cantidad, supongo que porque todo el mundo adivina que eres de al ladito de Bilbao), y música en vivo en la acera. Se acerca la noche, hay que retornar. A según qué horas no es un barrio recomendable ni encontrar un taxi fácil. De vuelta al centro, una Pizza deliciosa en El Palacio de la Pizza, en Corrientes, al lado del Gran Rex, la canción de Sabina en mi cabeza...

Y se me acaban los días. Y como siempre, o cada vez más, me apena dejar ese trozo de Europa, una Europa extraña, de gente cosmopolita y culta, mezclada con arrabaleros y pícaros.

Y es entonces cuando me dicen...descendemos de ustedes, somos iguales...

Y yo comienzo a buscar algún italiano en mi árbol genealógico, a ver si encuentro la explicación

domingo, 24 de abril de 2011

UN PASEO POR LA ALBUFERA DE VALENCIA

que alguno va a pensar que ultimamente estoy contando viajes que puede hacer todo el mundo....y tiene razón. Pero disfruto tanto moverme con los mios que ultimamente no estoy parando.

Carmen tenía ganas de ir a La Albufera desde hacía tiempo. Siendo de Alicante parecía mentira que nunca hubiese ido, pero Alicante de Valencia está a casi 200 kms, que se dice pronto. (En Vitoria, echas 200 kms y practicamente estás en Burdeos)

Aparte de visitar un paraje singular, tratándose de nosotros, os podeis imaginar que una elemental curiosidad gastronómica pugnaba por manifestarse.

En cuestión de arroz somos un poco talibanes, para qué vamos a engañarnos. El arroz que había tomado en Valencia nunca había superado, ni con mucho, el arroz tomado 150 kms más abajo. Decidí escoger con cuidado el sitio, no me equivoqué.

Llegamos a El Palmar. El pueblo en cuestión se encuentra lleno de restaurantes. Al acercarnos por la Carreterra de El Saler ya observamos las típicas Barracas (Que por otra parte no las he visto en nigún sitio más). En pocos sitios como aquí se da el escoger algo tan limitado en el espacio como una construcción típica de toda una región.

L'establiment no es un sitio barato. La amabilidad desde que te toman la reserva por teléfono es exquisita. Como os decía, no he tenido suerte en Valencia. He ido muchas veces y no he comido habitualmente buen arroz (Aunque reconozco que soy exigente). Teníamos una mesa desde la que observábamos un canal de la Albufera, rodeado de carrizo y cañaveral.

Queríamos tomar de todo lo que nos recomendasen. Cuando voy a un sitio me suelo dejar aconsejar. Alguna vez me ha ocurrido que el hostelero de turno me ha querido colar lo que se le había quedado atrasado. Viajo mucho...no vuelvo y Santas Pascuas

Comenzamos con una titaina con croquetas de bacalao. Las croquetas no me gustaron (Soy más de croquetas de jamón y pollo), pero ese revuelto de tomate, pimiento y piñones estaba espectacular.

Tambien probamos el All i Pebre (En realidad el all i pebre significa ajo y pimentón), anguila de la Albufera con patata y una salsa picante. A mí el anguila me gusta. Procuro que mis hijos coman de todo y, por si acaso no les dije lo que estaban comiendo...les gustó

Nos dijeron que con estos entrantes íbamos servidos, que había que acabarse el arroz.

Antes del arroz nos trajeron el all i oli. A todos nos encanta (Sabemos que cuando tomamos all i oli los besos y arrumacos quedan prohibidos hasta el jueves, por eso del aliento, pero todos lo damos por bien empleado). Sencillamente espectacular

Y llegó la paella de conejo y pollo. Os lo he dicho, con el arroz pocas bromas. Pocas veces en mi vida he probado un arroz tan delicioso, en su punto, con el sucarrat crujiente y no pasado. Los caracoles en su punto, la carne sabrosa, en fin...podría acabar la entrada aquí...

Cuando te metes una comida así deseas que no acabe. ¿Postre o café?...¡Postre y café!

Teja de almendra con helado de turrón y chocolate fundido. Tres días despues todavía me acuerdo de la teja...del helado...en fin

"Le voy a invitar a un licor de hierbas" me dice el encargado

"Le voy a pagar un chupito de Cardhu", le contesto yo

"Usted pagará lo que pida y quiera yo. Al Cardhu le invito"

Sabeis que soy una persona cobarde que me arredro ante el peligro. ¿Una pelea por un Cardhu? Deja, deja, que gane él

¿La cuenta? Bueno, no fue barata tratándose de arroz. 40 napos por persona incluyendo vino y cafés. 40 napos que pagaría con gusto cuantas veces hiciese falta por comer como comí.

Había que bajar el arroz. En El Palmar hay una industria turística cuya finalidad es pasearte por la Albufera en sus barcas de pesca observando las barracas, las aves que crían y las artes de pesca. Una opción sumamente recomendable..

Por 5 napos por adulto y 3 por niño (Y contaron a Maria como niña, que hace falta tener ganas), una horita viendo garzas reales e imperiales, redolís a medio recoger (Artes para pescar, principalmente la anguila), cañas, barracas y el atardecer en La Albufera. El barquero, treintañero de El Palmar, enrollado y sabio...una delicia

A la hora de bajarnos, yo no quería que acabase el día

"¿Una horchata?"

Los niños a todo dicen que sí.

Supongo que más de un valenciano me dirá que estoy equivocado, pero la mejor horchata que conozco la hacen en La Alboraya. (O sea, como cuando un mexicano se viene a Madrid y, ya que está en Europa, se da un garbeo por Moscú)

Tiramos esos veintitantos kilómetros hasta La Alboraya para meternos semejante horchata a fuerza de Fartons.

E hicimos el día

Vamos, que solo nos faltó quemar una Falla

jueves, 21 de abril de 2011

UN DIA EN BARCELONA

Tengo tanto trabajo que se me acumula lo pendiente. Sí, sé que nos habíamos quedado en una Calçotada en el Montseny con Pepo, pero nos quedaba un día para pasear por Barcelona. El avión lo teníamos a las 9 de la noche con lo que podíamos pasear sin prisas. Carmen quería visitar la Sagrada Familia, y a mí pasear por Barcelona siempre me ha gustado.

Nos levantamos pronto. Habíamos dormido en el desván de la Masia, acondicionado como una habitación doble. Despues de la Calçotada, me seguía sintiendo lleno, pero teníamos pagado el desayuno.

JA y yo bajamos a desayunar. En una casa rural catalana, ante la pregunta, "dulce o salado", siempre escojo la segunda opción. Sé que no saldré defraudado.

6 Rebanadas de "Pa de pages amb tomaca", o pan con tomate, que diría un clásico y una bandeja de embutido que, sin ser extraordinario, sí era una ración para dos más que meritoria. Esto sin un porrón de vino, como que no entra, y aunque los meapilas politicamente correctos piensen que empezar a beber temprano es índice de decadencia, siempre le vi a mi padre tomarse un poco de pan con chorizo y un vaso de vino a las 10 de la mañana (Cuando venía de los avisos médicos), y ahí le teneis. Para mí, los domingos, salir a la terraza con un bocadillo de chorizo o de jamón con un vaso de vino y lectura es uno de los placeres por los que merece la pena vivir.

Pepo nos vino a buscar. Le pedimos que nos llevase a la estación de tren y nos fuimos en el cercanías a Barcelona.

En el camino pensé qué es lo que podían ver los niños en un día. Fundamental la Sagrada Familia. Luego un paseo por el Barrio Gótico y la Ciutat Vella. Si nos diese tiempo para ver algo de Modernismo (La Pedrera, el Parc Güell), mejor, pero no creía que llegásemos.

Nos bajamos justo en la Casa Batlló. Comenzábamos con las Colas. Gaudí me gusta y he seguido su obra, no solo en Barcelona, sino en Astorga, Comillas....

Barcelona siempre fue una ciudad cosmopolita. Despues de las Olimpiadas entro definitivamente en los Mapamundis. El turismo de masas yo no creo que la esté ayudando. Sin embargo se han sabido situar como ciudad de crucero y esto deja un montón de ingresos a la ciudad. Ultimamente creo que el fijarse tanto en Madrid la está haciendo más provinciana (Siempre tendemos a igualarnos por abajo, en vez de por arriba) porque Barcelona y Madrid son diferentes, y Madrid siempre fue menos cosmopolita, entre otras cosas por carecer de mar.

A dos paradas de metro estaba la Sagrada Familia. Habíamos sacado las entradas por internet. Lo recomiendo...las colas son inmensas. Gracias a la red entramos directamente.

Había ido hará unos años, cuando creo recordar todavía estaba sin cubrir. Esta vez me encantó. Perfectamente rematada la catedral por dentro. La Nave con una sensación de amplitud inmensa. Las columnas hiper originales. El altar no me gustó. Me pareció que tal grandiosidad no podía resolverse de esa manera tan simple, pero para gustos...

En aras de mi verdad he de decir que observo una libertad en los accesos a estos templos, así como a los taoistas y budistas que echo en falta en las Mezquitas (Esto para los meapilas de la Alianza de Civilizaciones. La cuerda ha de tirar para los dos lados. Si tira solo para uno, malo...)

Nos dirigimos al Barrio Gótico. Siempre me ha gustado pasear por sus calles estrechas, observando rincones mágicos. En La Plaza de San Jaume había una manifestación de esas que tanto abundan en Barcelona. Unas dos docenas de personas protestando por el insomnio de los galápagos o algo parecido. Acaba siendo un poco cansino. Supongo que es uno de los precios que hemos de pagar. Hace 40 años estaríamos encantados de que se pudiesen celebrar.

Nos metimos en una taberna pretendidamente vasca, Iñaki creo que se llamaba, a tomar un pote y un par de pintxos. La golfería de algunos hosteleros les acabará pasando factura. Con eso de que somos una ciudad turística y nos visita mucho gringo han confundido el tiro y se piensan que todos somos gilipollas.

Lo único vasco que tenían era el nombre. No había sidra. En barra una caña, una coca cola, un mosto, una fanta y 4 croquetas insulsas.

Pagué con 20 Napos y el pavo me dijo que le faltaban dos. Ante mi cara de sorpresa me dijo que cada mierda de croqueta costaba 3 €...¡¡¡500 pelas!!!

Despues del rejón, quise ir a lo seguro. Habíamos pasado por delante. Un establecimiento de siempre...y nunca mejor dicho...no nos equivocamos

Aunque llevo 30 años en Madrid, mi acento me delata. La camarera (Con unos cuantos lustros de servicio en el lugar) no nos identificaba. Al preguntarnos de donde éramos, los niños dijeron que de Madri (snif), pero ella me dijo...usted no, ¿verdad?

No sé que oscuro mecanismo mental actúa en Cataluña de vez en cuando, que en cuanto te identifican como vasco, empezamos con los agures y los eskerrikaskos a cada frase que te dirigen. Obviando que cuando esto sucede les miro levantando la ceja como Sobera, la comida fue "es-pec-ta-cu-lar"

Lágrimas me salen al recordarla. No recuerdo bien los entrantes, pero los recuerdo exquisitos. Como plato principal un cochinillo a la catalana con sus frutos secos, pasas, y esa salsa..., mmmmm, mis hijos un arroz al horno...

Una tarta de avellana para tirar cohetes...no pude acabar con otra cosa que un café y un Cardhu

Nos dijeron que era el segundo restaurante más antiguo del mundo, despues de Casa Botín. Yo, que he comido en ambos, le doy la medalla de Oro al catalán, sin duda

De allí salimos hacia la Catedral. A partir de las 5 de la tarde no cobraban. Llegamos a menos cuarto...era bobada gastarnos 20 Napos por un cuarto de hora, y nos sentamos al solecito en las escaleras escuchando un músico callejero.

Lo de los políticos de izquierdas catalanes me ahoga un poco. La puta manía reglamentista de influir hasta en el último comportamiento del ciudadano. Y es que hasta los actores que ejecutan las estatuas callejeras han tenido que pasar un examen del Ayuntamiento, cuanto mas los músicos, que además hacen ruido (Este en concreto sí, hacia ruido, pero debía de ser de la cuerda, Mercedes Sosa, Quilapayún, en fin... una vuelta a mi juventud ;-) )

La Catedral, aunque en obras, merece la pena, y el claustro es una auténtica maravilla.

De ahí, todavía con solecito, a la Iglesia de Santa María del Mar, en Ciutat Vella, protagonista mudo de "La Catedral del Mar" de Ildefonso Falcones.

No andábamos sobrados de tiempo. Un paseo hasta la estatua de Colón y en tren al Aeropuerto

Un fin de semana maravilloso. Unas comidas para repetir y ya esperando la próxima excursión...que nos toca Santiago...de Compostela

sábado, 16 de abril de 2011

UNA COMIDA MEXICANA EN EL DF

Lo he dicho a menudo, el español más extraño a un oido de España es el Mexicano. Si vais a Cuba desde España, independientemente del acento, sereis capaces de entenderlo en más de un 90% de sus términos. Disfrutareis con el maravilloso español de Colombia que parece que quien te habla no es un taxista sino un catedrático. La dulzura del español de Ecuador, el bonito acento chileno, ese acento porteño en Buenos Aires.... Pero como tengais que ir solos a un restaurante en Mexico...os deseo mucha suerte...y no por el picante.

He de reconocer que en México, particularmente en un restaurante, necesitas un diccionario para entender con precisión casi el 50% de lo que te cuentan. No es que en una conversación normal no captes el significado de la misma, pero en cuanto entres en harina...prepárate para poner cara de no saber lo que te cuentan y no te preocupes, nadie sabrá que finges ;-) .

Sigo unos cuantos blogs culinarios. Nunca he descrito una comida con profusión, sino en base a las sensaciones que despertó en mí. Sin embargo, Fran, me reclamó una descripción detallada en una entrada anterior y, la siguente comida en el DF le expliqué a mi acompañante que íbamos a pasar un poco de verguenza (Gracias a Dios había confianza).

Fuimos a un restaurante elegante. Le indiqué que debía tomar fotos de los platos y me ayudó a explicarles a los camareros el propósito. El resto de los comensales no tenían por qué mostrarse comprensivos con mi flash.

Y comenzamos con una auténtica sinfonía de sabores (Picantes en su gran mayoría), pero inolvidables.Como botana (aperitivo) pedimos un tequila reposado, Cazadores, con sangrita (Jugo picante a base de tomate, cebolla, naranja y limón que me encanta). Se mezcla en la boca (un buchito de tequila y un buchito de sangrita) ...y es delicioso. Para acompañar nos sirvieron un Molcajete de Queso panela, salsa verde y aguacate con tortitas de maiz...mmmmm

Habeis de saber que en muchos restaurantes populares de Mexico, a la hora de comer solo te cobran por la bebida, comiendo la botana variada que te sirvan.

Compartimos Tacos de lengua de res. La salsa para acompañar picante, como no podía ser de otra manera, realzaba el sabor de la tortita. Eso sí, había que ser extremadamente cuidadoso con el chile, si te pasas...estás muerto.

Mi acompañante pidió un Pulpo al Epazote. El epazote es una hierba aromática típica de México. Me lo dejó probar. El contraste entre la hierba y el pulpo era maravilloso. El pulpo estaba un pelín blando para mi gusto, pero es que para dejar el pulpo en su punto, Carballiño queda lejos del DF ;-)

Yo tomé un Mixiote de borrego. Se trata de un estofado hecho en hoja de Maguey aderezado con Mixiote que es una salsa de chile guajillo y especias. Si sin las explicaciones aquí presentes sois capaces de identificar lo que os estoy relatando una de dos...o sois de Guadalajara (Jalisco), o me estais engañando...

El Mixiote estaba tierno. Tradicionalmente cocido en su propio jugo en un agujero hecho en la tierra, el de esta versión urbana no se quedaba atrás en su punto de carne.

No he de desvelar que una vez que comienzas con tequila, pasarte a otra cosa es una ordinariez ;-) Efectivamente, cayeron unas cuantas rondas durante la comida.

Si os fijais en la siguiente foto, desenfocada, se ve una pizca roja en lo alto de la tortita. Se trata de menos de un milímetro cuadrado de chile de árbol. Mi acompañante me dijo, "cuidado, es muy picante". Al ser de cerca de Bilbao, creí que esa cantidad me daría un punto de picante. Me equivoqué, pues me enchiló. Y os explico que enchilarse es una reacción fisiológica del cuerpo ante un exceso de picante. Comienzas a sudar, la temperatura corporal sube, y puedes llegar a sufrir procesos febriles. Me quedé en unos sudores de cojones y una boca insensible por espacio de un cuarto de hora. Nada grave, jejeje

La verdad, a excepción del exceso de picante que es un gaje del oficio en Mexico, la comida estaba siendo fabulosa. Y quisimos acabar con postres....

Mi acompañante tomo Nieve de Zapote, que es una fruta típica de Mexico. La Nieve es un helado sin leche, propio de Mexico en temporada. Muy suave le acompañaba una tortita de harina deliciosa.

Yo opté por un pastel de tres leches con cajeta (Una especie de dulce de leche), o sea, leche en cuadrafónico que estaba espectacular. Una variedad inmensa de matices y sabores (Y sin nada de picante ;-) )

Tomé una foto de la Carta de postres para que, sin ninguna explicación, analiceis si entendeis el 50% de lo que aparece o no.

¿La cuenta? Estábamos en uno de los restaurantes más de moda del DF. El Servicio espectacular y no me atrevería a describir al resto de comensales como "populares" ni mucho menos. Los coches de lujo en la puerta así lo atestiguaban. (Las caras ante mis fotografías a cada plato, tambien). En total unos 30 € por cabeza.

Espero, Fran, que te des por satisfecho. No espereis que lo repita. Uno tiene su verguenza ajena y ver esas mujeres enjoyadas viéndome sacar fotos a los platos todavía me sonroja...

lunes, 11 de abril de 2011

EL LIBRO ELECTRONICO

Ya os he contado que no duermo en los viajes. Me distraigo trabajando en el ordenador y leyendo mucho.

Habitualmente, a mis viajes transoceánicos, me llevo del orden de tres o cuatro "biblias", con lo que el peso de la maleta se incrementa peligrosamente, ya que a ellas hay que añadir ropa para quince días (Y uno, muy limpio, se cambia de calzoncillos por lo menos una vez a la semana, con lo que hay que guardar espacio en la maleta para uno por lo menos)

Juan Carlos, me dió la idea. Andaba detrás de uno de esos artilugios pero sin decidirme, y me convenció.

Este fue el primer periplo con libro electrónico. Lo he disfrutado. Llevo del orden de 150 libros cargados sin preocuparme de pesos y de espacios pero....con las regulaciones aeronáuticas hemos topado.

El otro día, en un vuelo de una Compañía sudamericana, una vez que la sobrecargo avisó que había que apagar todos los dispositivos electrónicos, una azafata, con un reloj digital CASIO de los que están de moda ahora de hace 20 años (Y mira que son feos), se tiró en plancha hacia mí y me indicó que apagase el libro electrónico.

Mi cara de sorpresa no debió de hacerla reaccionar. Simplemente pregunté, "¿Va a quitar la pila de su reloj?"

Supongo que nadie le había preguntado nada parecido nunca, porque, en medio de unos cuantos balbuceos, me contestó que los relojes estaban permitidos.

"¿Y cual es la diferencia entre mi display y el suyo? ¿El tamaño?"

"¡Apáguelo!"

Como no era cosa de que me tirase por la ventanilla decidí obedecer, que según dónde, la mujer latina es una mujer de caracter ;-)

En vuelos de más de 7 horas, mi compañía actual me permite volar en Business (Sí, como los eurodiputados, pero ese gasto va contra mi cuenta de resultados. Y menuda munición os acabo de proporcionar). He de certificar, igual que anteriormente dije lo contrario en turista, que las azafatas de Iberia en Business son la cosa más encantadora y sonriente con la que me he cruzado (Leyre, la palabra "cosa" forma parte de una expresión. No te lo tomes literalmente y me cierres el blog)

Volviendo de México a Madrid, a punto de aterrizar, otra azafata, con el mismo tipo de peluco me hizo saber que debía apagar el libro.

Ante mi sorpresa y posterior pregunta de si ella iba a sacarse la pila de su reloj me miró con cara de súplica (Esto en turista se hubiese solucionado de otro modo menos versallesco, intuyo). Decidí no putear a la amable y sonriente azafata y lo apagué.

Señores de las líneas Aéreas. Las normas lógicas, son lógicas. Las ilógicas, no.

¿Van a prohibir TODOS los elementos electrónicos o solo los que les den la gana? Porque esto me recuerda aquellas normas que alguien escribió hace años y que, como nadie protestó nunca, ahí se quedaron

Por cierto, el día que les dé por pensar en los marcapasos nos buscamos un problema en cualquier aterrizaje...

viernes, 8 de abril de 2011

COMIENDO EN UN PUTICLUB

Esta entrada sé que no va a pasar inadvertida.

Por una parte, todos los salidos que en el mundo hay, via Google, la van a hacer famosa y multiplemente visitada en la Red.

Por otra parte, Leyre y compañía, se me van a tirar al cuello defendiendo una cosa y la contraria en favor de la chorrada politicamente correcta.

Pero ando cansado. He visitado 8 paises en 10 días, 6 en 3. Empiezo a no saber como me llamo ni donde estoy.

Bueno, donde estoy sí, porque tengo el paladar que parece tela asfáltica. Y esto me suele suceder en México donde la expresión "que no pique", no existe en el diccionario.

O sea, que la semana pasada estuve en Chile y en Buenos Aires. Esta semana en Perú, Ecuador, Panamá, Colombia, Costa Rica y México.

Lo mejor el martes, donde desayune en Quito y tuve una reunión. Almorcé en Panamá y tuve otra. Cené en Bogotá. Ya no es eso de "si hoy es martes estoy en Bélgica", no. "Si hoy es martes y son las tres de la tarde hora GMT, estoy en San Salvador".

Ayer aterrizaba en México DF. El avión tocaba tierra a las 21,40. Tenía que ir a Toluca, a unas dos horas del DF. Había un bus. El último salía a las 23. Si no, me quedaba el coche de alquiler. (No sé que es menos peligroso, si conducir tú mismo con un GPS por la noche en México, o que te robe un conductor por cuenta ajena)

Salgo follado del avión. LLego el primero a la aduana. Como una exhalación acabo en las cintas de las maletas. Son las 10 y 10...estoy tranquilo.

Las 10,30...las maletas no hacen acto de presencia. Las 10,40 comienzan a salir. La cinta se para. Las 10,45, la cinta vuelve a moverse otro par de minutos. Las 10,51, mi maleta aparece.

Lo único que me falta es que me paren en la aduana. Llevo un equipo demo, y dependería de las ganas de mordida del funcionario de turno.

Paso el escaner. Estamos a primeros de mes. Acaban de cobrar. Solo me falta pulsar el botón a ver si se pone rojo, y me abren la maleta o verde y salgo disparado.

Son las 10,54...¡verde!

La parada de los buses está en el piso de arriba. Con mi maletón de 15 días y el trolley emprendo una carrera. Están cerrando la taquilla...me ven llegar...me esperan

Dos horas despues llego a Toluca. Estoy muy cansado, pero he de seguir contestando correos.

A las 3 pliego, me tengo que levantar a las 7, me recogen a las 8.

Mi cliente es un tipo super amable. Hace realidad uno de mis sueños. Yo, que he pagado con mis billetes varios aviones, nunca había entrado en una cabina. Me mete en un simulador de un A320. Lo estrello en el despegue. Es alucinante.

Luego lo despega él, y los ingenieros nos empiezan a meter en zonas de turbulencias. La sensación es tan real que creo que me voy a caer del asiento del copiloto.

Me lleva a un hangar donde están revisando otro Airbus, y me vuelvo a sentar en una cabina de verdad (Ya no llevan volante, jejeje, sino un joystick...supongo que porque los pilotos jovenes aprendieron en videoconsolas, jejej)

Tengo otra reunión en el DF por la tarde. Me arregla el transporte y llego a mi hotel en Reforma.

Es hora de comer y me meto en un restaurante cercano. Allí me recibe una modelo medio desnuda. ¡Coño, no me habré equivocado de sitio!, pienso.

Los Mexicanos son todos muy machos, y les ponen unas buenas hembras. Los empresarios eso lo saben, y contratan a vendedoras que no saben de lo que hablan pero tienen un par de buenas razones. No me lo han contado. Machistas hasta la médula, en Mexico las vendedoras de más éxito en las empresas con las que he trabajado, no sabían hacer la o con un canuto, pero vendían, ¡joder que si vendian!, y los clientes las sonreían con cara de gilipollas mientras la otra les leía un catálogo

Pues algo parecido en el restaurante. El pibón sabe que está muy buena y lo explota. Con un escote hasta el ombligo y la espalda totalmente descubierta me presenta la mejor y más sugerente de sus sonrisas. Balanceando el culo me dirige a una mesa y, volviéndome a sonreir, mira hacia atrás para comprobar que la estoy mirando mientras se marcha.

La camarera, rubia, luce un corpiño rojo que parece que va a explotar. Yo he visto "dancings" en Las Vegas con mujeres más recatadas. (Los que no sepais qué es un dancing, meteos en la Wikipedia, este es un blog para todos los públicos)

Veo los comensales a mi alrededor. Grupos de hombres a los que se les cae literalmente la baba, mientras ellas les ponen la servilleta entre las piernas. Rapidamente me la pongo yo solito...

Pido una sopa de carne y unas quesadillas. Tengo prisa.

La rubia me adereza la sopa de carne. Yo le digo que soy español. Para mí, sin picante, ya es inaguantable en México. Me sonríe. No sé si se piensa que le estoy proponiendo algo, pero el bailoteo de culo mientras le echa los chiles, gotas de salsa y limón a la sopa, hace que piense que el espectáculo acaba en un desnudo integral.

Me arde la boca, y la muy hijaputa me pregunta si me había gustado. Con lágrimas en los ojos y sin respiración le contesto que sí, que estaba muy buena, y no sé si se piensa que lo digo por la sopa o por ella.

Con el paladar convenientemente anestesiado por el picante, puedo meterme cualquier relleno de quesadilla sin enterarme. Mi estómago lo sufrirá luego.

Apoyándose en la mesa para que se intuyan...en fín, eso, me pregunta si está todo a mi gusto. Pido un café...sin picante, para no contestar.

Pago y me despide con un "esperamos que le haya gustado"

Y el resto de comensales encantados de ser tan machos y que les atiendan tan bien.

Despues de mi reunión, en Reforma, paro un taxi. Le doy la dirección de mi hotel. Es la misma calle y me pregunta que por donde quiero que me lleve. Menos mal que sé que son 10 minutos en línea recta, si no, ese cabrón me despluma en cualquier callejón.

Estoy en el hotel. Tengo curro para unas cuantas semanas sin parar. He de cenar

¿Me arriesgo a meterme en otro burdel? Casi mejor tomo un sandwich club del servicio de habitaciones. Mi estómago no podría resistir más picante...ni mis ojos tampoco