viernes, 30 de octubre de 2009

LA HISTORIA DE UN MEDICO Y ATANASIO

Decir que la relación con mi padre ha sido dificil me parece un acto de generosidad sin límites. Las broncas que, hasta que mi madre falleció, mantuve con él, sobrepasan la normalidad. Una vez que se ha quedado solo hemos retomado una relación difícil, aunque bien mirado solo siempre estuvo, fisicamente solo, quiero decir.

Nuestra relación es complicada pero ambos estamos comprometidos en basarla en aquello que nos une, en vez de en los choques de trenes de nuestros respectivos caracteres.

Mi padre fue el médico más joven de España. En poco más de tres años acabó una carrera de seis, habiendo suspendido primero en junio practicamente íntegro (La pandereta y la tuna. Mi padre sí que tocaba bien la pandereta, y no yo).

Hubo un catedrático, hueso él, que le dijo a principio de curso que nunca aprobaría en el mismo año dos de las asignaturas más dificiles de la carrera, las cuales él impartía al ver que se había matriculado de ambas. Creo que eran Médica I y II. Honesto le tuvo que poner Matrícula de honor en ambas, la I en Junio y la II en Septiembre.

Mi padre es un médico con un instinto impresionante pero, sobre todo, es un médico de vocación. En mi familia la medicina se mama. Su tatarabuelo ya era médico y, de ahí hacia abajo, por línea directa, todos lo han sido. De 4 hermanos, mi padre y un tio son médicos y, los otros dos, farmaceúticos. Y así hemos llegado a mí, a quien simplemente la visión de la sangre marea.

Yo, pobre Ingeniero de Telecomunicación, no he llegado a lo que supongo que mi padre siempre deseó, aunque mi hermana mayor sigue la tradición familiar, y es una médico excelente, pero para mi padre no es lo mismo. En su fuero interno creo que nunca me ha perdonado que yo no me haya hecho médico y, supongo, piensa que lo hice para fastidiarle.

Mi padre es un médico a la antigua. Comenzó en Soto en Cameros, pueblo serrano famoso por sus mazapanes. No era extraño que pasase noches enteras a lomos de mulas para visitar a pacientes. Al llegar a casa de un paciente cambiaban de mula para continuar o volver. Esas cosas de los pueblos. En una de esas noches mi madre se puso de parto, que ya son ganas de joder. Con una gran nevada en medio de un Enero helado, mi padre al mando de un 600 de segunda mano, con la ayuda del veterinario del pueblo armado con una pala para quitar la nieve de la carretera de montaña, fue incapaz de alcanzar el hospital. Y ahí llegué yo, en una curva perdida, en medio de la carretera, mientras la calefacción del 600 funcionaba a tope. Bien pensado, comencé a tocarle los cojones a mi viejo desde bien pequeño, y eso solo era el principio.

En Villalaco,pueblo de Palencia, a mi padre le pagaban, quien podía pagarle, con trigo o liebres. Eso de la Seguridad Social debe de ser un invento moderno.

Recuerdo una epidemia de tifus con decenas de infectados en el que considero mi pueblo. Mi padre estuvo sin dormir cerca de dos semanas. Eso de las guardias en los pueblos tambien debe de ser otro invento moderno.

A mi viejo le comenzaron a matar la ilusión cuando le obligaron a trabajar en un centro de salud y tuvo que compartir trabajo y espacio con "funcionarios de la sanidad" en horario tasado. Le recuerdo toda la puta vida hasta entonces, mientras le levantaban varias veces por semana de madrugada el día menos pensado para atender enfermos en sus casas. Y al día siguiente a las 9 estaba pasando consulta puntual, aunque hubiese estado de jarana toda la noche.

Supongo que muchos pacientes se le han muerto siendo él su médico, es Ley de vida, pero sé de tres muertes que le conmovieron. El primero en Soto, su primer muerto. Supongo que es algo que marca la vida de todo médico.

Un niño en Labastida. Le recuerdo que vino con unos puntos en la cabeza por la noche. Eso de las ambulancias es otro invento moderno. A toda hostia mi padre intentó llegar a Vitoria en su coche particular porque sabía que con los medios de los que disponía en la consulta era imposible salvar a aquel chaval. Mientras entraba a la carrera por urgencias con el niño en brazos, una puerta se le cerró dándole en la cabeza.

La tercera muerte es la de Atanasio.

Cuando murió, Atanasio contaba con 89 años. Un paciente a quien mi padre le atendía donde tocase, en la consulta, en el bar, o en su casa. En los pueblos los médicos eran como los modernos "seven eleven", estaban abiertos 24 horas. Y mi viejo siempre dijo que en un pueblo no puedes dejar de ser médico en ningún momento. Con lo que si Atanasio le preguntaba lo que fuese con un txikito de vino por medio era tan consulta como en el quirófano más preparado.

Atanasio fumaba como un carretero y mi padre, no sabe muy bien por qué, un día que Atanasio tosía un poco más de la cuenta, le aconsejó que dejase de fumar. Tres meses despues Atanasió murió y mi viejo nunca se lo perdonó.

Nunca se perdonó el haberle jodido al pobre Atanasio los últimos tres meses de vida. Es más, yo creo que tiene la sospecha de que, quien realmente mató a Atanasio fue él, y despues de más de 40 años de profesión, creedme, no os imaginais lo que le jode.

miércoles, 28 de octubre de 2009

TREINTA MIL VISITAS

Que se dice pronto;

Teniendo en cuenta que 23 ha entrado unas 28.000 veces, y yo unas 1.500, he de felicitarme porque hay 500 visitantes que han caido en este rincón voluntaria o involuntariamente.

Cuando comencé esta experiencia hace año y medio ni por asomo podía imaginarme que tanta gente podría leer las pajas mentales, aventuras y desengaños de un servidor.

A todos os doy las gracias. Gracias porque me habeis acompañado en momentos complicados. Me he reido con vuestras intervenciones y tambien me habeis hecho reflexionar.

Siempre he pretendido que, incluso tratando temas serios, este fuese un rincón donde imperase el buen humor, el sano desbarre y el poner a caldo a lo establecido, que bastante a caldo nos pone lo establecido a nosotros.

Espero que siga habiendo gente interesada en el debate de ideas en este foro, aunque el autor trate temas más o menos interesantes.

Reuniré un consejo de administración con 23, y si el éxito sigue como hasta ahora, vamos a subir las tarifas a los anunciantes, que ya está bien de hacer el pringado.

Cuando lleguemos a los 50.000 rifaremos entre todos una muñeca chochona, o un masaje en el Occipocio de Fuego incandescente, lo más barato, que estamos en crisis.

domingo, 25 de octubre de 2009

LA FERIA DEL MARISCO

Para uno que ha trabajado en una empresa gallega e, incomprensiblemente siendo de más acá de Ribadeo, ha hecho amigos allí (Y buenos) supongo que no es nada extraordinario. Sin embargo es un clásico que todos los años nos gusta dejarnos caer por la Feria del Marisco de las Rozas.

Ya, ya, gallegos que me conoceis. No os tireis en plancha con el puñal en la boca. Yo tambien podría hablar de alguna Tarta de Santiago, en Santiago, "para turistas" y no lo hago.

Este año tocaba la Feria del Marisco que no sabía si iba a tener pasta o no...pero Dios da pan a quien no tiene dientes y pasta a quien no lo merece, y creo que en este apartado entro yo.

El pasado domingo aprovechamos que vivimos en un área "liberal-conservadora", de misa dominical vamos y, uno que es de pueblo (Esto mi mujer no lo comprende), nos dejamos caer a la una y diez. o sea, en mitad de misa mayor.

Ni un alma en la cola de pedidos.

Yo a los niños ni les obligo a ir a Misa ni a que no vayan. O sea, si quieren asistir al culto, encantado, es su decisión. Si no quieren, unos años que se ahorran. La educación que pretendemos darles (Con permiso de los abuelos, por supuesto, y sin que se enteren demasiado, que ya se sabe que cuanto menos se discuta mejor para todos) es una educación ética en la que encaja la práctica religiosa...y lo contrario, que diría Rajoy. Que sepan diferenciar el bien del mal y procuren practicar el bien, independientemente de si existe algo que nos trasciende o no. Al final los de Gurtel y aledaños me siguen demostrando que las misas dominicales no te hacen mejor persona. Si acaso te ven a la salida de Misa, que no es lo mismo.

Que conste que mis ideas respetan absolutamente a aquellos que, de corazón, creen. Para nada a los golfos que, además de ser golfos, son intransigentes. (O sea que los intransigentes a secas todavía tienen un pase, aunque sea con el pico).

No sé en lo que estábamos, pero ya era hora de pedir. Unas ostritas de Arcade, mejillones (Son humildes pero me encantan), pulpo, gambas a la plancha, una mariscada para dos, empanadas, y una tarta de Santiago, aderezado todo con un buen Alvariño.

Y JA que quiere arroz marinero....siendo su madre de Alicante... (A estos niños no hay Dios que les entienda)

Vienen con la mariscada y los niños que no han probado nunca los percebes. Mierda para mí porque yo, a sus años, no había navidades que no tomase percebes y angulas, teniendo mi padre un trabajo en el que ganaba la tercera parte, a euros corrientes, de lo que gano yo. (Tampoco la vida estaba tan cara, pero si él se lo podía permitir no sé por qué yo no. ¿Quizás porque nosotros no teníamos Mc Donalds?)

No podemos terminar, y la gente comienza a salir de Misa, como imaginaba, y se comienzan a formar colas para pedir. Y me doy cuenta de que, aunque parezca que todo cambia, hay muchas cosas que siempre serán iguales. ¡Mierda! Y había quedado en avisar al Marqués. ¡De esta me mata! (¿O a lo mejor estaba en Misa?)

viernes, 23 de octubre de 2009

UNA MAÑANA EN LISBOA

Me da que despues de los tutes que me he pegado durante los últimos diez años, los viajes en este trabajo me van a parecer como coger el metro.

Llegaba al avión montándome de un salto, como cuando se te escapa el tranvía. En la fila de atrás del avión, tres argentinos no paraban de hablar. Las 8,30 de la mañana y parecía que tenía tres clones de Valdano detrás. Frases larguísimas que perdían su significado para mí a los 30 segundos de que las hubieran comenzado. Me dediqué al periódico. Hacía años que no viajaba sin ordenador, pero entendí que para un viaje tan corto no merecía la pena llevar peso.

Aterrizamos y espero que me pase a recoger Noe con el Arca. ¡El diluvio Universal! Y yo con traje de veranito.

Las nueve menos diez hora portuguesa (La misma que quieren poner algunos gallegos. Solo lo digo por fastidiar) ;-)

Tomo un taxi (Ya no cojo taxis para que no se descojonen mis amigos Venezolanos). Al indicarle la dirección, el taxista que saca su cara más triste y comienza a decirme que es imposible que lleguemos a tiempo. Toda la saudade portuguesa concentrada en esa cara. Comienzo a pensar que es otro listo que me quiere dar unas vueltas de más. ¡Qué error!

Al salir del perímetro del Aeropuerto, ¡Menudo trancón! que dirían mis amigos Bogotanos. Y ahí que ves al taxista comenzar a hablar solo lamentándose. Menuda situación para un fado.

A la media hora toma una salida para intentarlo por otro camino. Un profesional, pero lo mismo. Media hora más adelante lo intenta de nuevo. A la hora y cuarenta y cinco minutos de montarme en el taxi llego a mi destino que, en circunstancias normales no dista más de 20 minutos. "La lluvia" me dice. 35 €, 105 minutos. El desastre podría haber sido mayor, pienso yo.

Entramos en la reunión. ¡Cuanto tienen que enseñarnos los portugueses en cuestión de idiomas! Todos hablan mejor español que mi inexistente portugués por mucho que lo intente en seudo gallego. Por supuesto, cualquier taxista habla aquí inglés, que para eso las películas siempre se emiten en Versión Original subtitulada.

Al acabar la reunión nuestro contacto portugués nos invita a comer. Lujo de Caldereta de pulpo con mi vinho branco, mientras él acompaña su guiso de Cerdo al estilo del Alentejo con esa bebida negra, dulzona, con burbujas y baja en calorias...no sé si queda claro. Un café y en 10 minutos estamos en el Aeropuerto de vuelta.

A la hora de montar en el avión, un grupo de enchufados que se cuelan por delante de varias parejas con niños pequeños sin que a nadie se le caiga la cara de verguenza. Ni a los enchufados, ni al personal de tierra, ni a la tripulación que los sienta en primera y les saluda efusivamente. Parecen pilotos. Apúntate una Air Europa.

Ante mis protestas en voz alta, todo el mundo me mira como las vacas al tren, menos las parejas con niños, claro.

Efectivamente, como coger el metro pienso mientras aterrizo en Madrid. Aunque me doy cuenta de que, generalmente, en el metro, se suele reservar el asiento para embarazadas y personas de edad.

jueves, 22 de octubre de 2009

ESTOY PERDIENDO FACULTADES

Hoy me tocaba Lisboa; Acostumbrado a la tranquilidad de los últimos 5 meses no recordaba lo jodida que es la M-40 por las mañanas.

Me levanté a las 6,30. Soy rápido duchándome. Me ví con tiempo. Me exprimí un zumo naranja y me preparé una tostada con aceite. Eran las 7. El avión salía a las 8,25 y ya tenía la tarjeta de embarque.

Salgo por la rotonda de al lado de casa y...¡Dios! ¡Qué atasco!

Ni para atrás ni para adelante. Había olvidado lo que era esto. Bonito momento para perder el segundo avíon de los mil que habré cogido en mi vida.

En lo único en lo que pensaba era en llegar al Aeropuerto. Cientos de excusas pasaban por mi cabeza. La más socorrida, un golpe de chapa, sin importancia, pero que me había hecho perder el avión. ¡Pues sí que iba a coger buena fama en la nueva empresa!

El tiempo pasaba y yo seguía parado. Los Túneles de El Pardo, las 7'30 y sigue atascado todo. A las 7'45 comienza a liberarse la carretera. ¡Dios, no recordaba que el aeropuerto estuviese tan lejos!

A los 55 minutos de salir llego al Aeropuerto. Son casi las 8. Tengo suerte y aparco rápido. No recuerdo un sprint más prolongado desde hace más de 20 años yo, que soy Diesel. (Lento pero constante)

Justo abren un control y salto a lo fosbury sobre la cinta.

¿La puerta? La D-65. ¡Mierda! Otros cientos de metros más. Las 8,15 y veo como están cerrando la puerta. Con la tarjeta de embarque en la mano, me tiro en plancha. La amable azafata de tierra me sonrie. ¡Esta es la mia! Le pido que me compruebe si me han incluido los puntos en la tarjeta. La azafata no sabe si darme en la cabeza o descojonarse de mi pachorra.

¡Soy un gentleman!

martes, 20 de octubre de 2009

LA TESORERIA DE LA SEGURIDAD SOCIAL

De verdad, es que es como para mear y no echar gota. Cuanto más lo pienso más absurdo me parece.

Esta mañana he ido a la Seguridad Social a por mi famosa Tarjeta Sanitaria Europea. Como por fín trabajo no creía tener problema.

Me han atendido rápido y muy amablemente. Me han preguntado donde iba a ir y les he comentado que durante esta semana a Portugal y a Francia con lo que, además, me han dado los protocolos específicos de ambos países, cosa muy útil por cierto. Una señorita encantadora.

Dado que he visto que mis datos tenían una errata, ya que nuestro Código Postal ha cambiado (No la dirección del domicilio), le he pedido que lo modificase, aunque la correspondencia llega correctamente.

Me ha dirigido a la Tesorería de la Seguridad Social, afortunadamente la puerta de al lado.

He vuelto a sacar otro numerito y en 5 minutos me estaban atendiendo. Al comentarle a lo que iba me ha solicitado mi DNI y ha realizado el cambio de Código Postal en mi ficha (Sin comprobar si le estaba engañando o no, pero bueno, el protocolo debe pedir solo el DNI, no la comprobación de que no estoy majara y voy engañando a los funcionarios públicos)

Ya que estaba, le he solicitado cambiar tambien el CP en la ficha de mi mujer. Me ha pedido su DNI y una autorización. He intentado explicarle que si mi CP ha cambiado, y si mi mujer vive en el mismo domicilio que yo, no había que ser muy inteligente para deducir que su CP tambien había cambiado. No ha habido modo. Eso no estaba reflejado en los protocolos. DNI y autorización.

O sea que ya sabeis, si Correos os cambia el código postal (No vosotros os cambiais de domicilio), y vas sin autorización, la Tesoreria de la Seguridad Social prefiere mandar las cartas a una dirección erronea y que se jodan los que clasifican la correspondencia en correos, o que se joda el contribuyente si no le llega. Y si es importante y no compra el BOE para ver si debe algo, a lo mejor hasta le multan.

¿Se puede ser más gilipollas? A esta gente la pagamos nosotros, no para que caliente la silla y nos moleste, sino para que haga algo útil. Y si están tan descoordinados que algo que depende de un ministerio y cambia no se actualiza en los organismos dependientes de otros ministerios, cosa que por si solo valdría la fumigación del responsable en cualquier empresa, por lo menos que el sentido común impere. La que se montaría si todos nos negásemos a pagar los impuestos un mes para que se pusiesen las pilas.

Y luego nos dirán que la Administración está incrementando su eficiencia. Desde luego, desde donde partimos tampoco es que haya que ir a Harvard...

domingo, 18 de octubre de 2009

PALENCIA, LA BELLA DESCONOCIDA; EL CAMINO DE SANTIAGO, EL ROMANICO, LOS CASTILLOS...

Bien que pueden pensar que es la "Bella desconocida".

Hacía un montón de tiempo que nos apetecía llevar a los niños a ver piedras. No de las de levantar, sino de las ya levantadas y con suficiente argamasa entre ellas. El Románico Palentino, aunque excesivamente concentrado en el norte de la provincia, es famoso. El Camino de Santiago que atraviesa la provincia a lo ancho está repleto de lugares de interés y, para mí, acostumbrado a la montaña, La llanura de Tierra de Campos es algo dificilmente olvidable.

Salimos el sabado tempranito y llegamos a Ampudia a eso de las 12 del mediodía. Habíamos reservado visita en el Castillo, propiedad de la Familia Fontaneda, la de las galletas, a la una. Ampudia es un municipio rico, lleno de aerogeneradores que proporcionan buenos réditos al pueblo. No parece que haya demasiado viento, pero si están, por algo será. La gente no invierte para perder pasta más que si eres político y montas un "Terra Mítica" y cosas por el estilo pero, en ese caso, tampoco lo hacen con su dinero.

En el castillo de Ampudia se firmó el traslado de la capitalidad de Castilla de Valladolid a Madrid. La familia lo debió de comprar en los años 60 y, desde entonces se han dedicado a rehabilitarlo. Se muestran una serie de salas, en la planta baja, donde se exponen archiperres de la colección privada de Eugenio Fontaneda. Y digo archiperres porque este hombre debía de ser el terror de su mujer que pensaría cada vez que salía de casa "A ver que mierda me trae Eugenio esta noche". Los objetos más inverosímiles y curiosos se encuentran allí. No puedes decir que es una colección de nada en concreto, sino una colección. Curiosa la mentalidad del coleccionista que, cada vez que ve algo raro se lo lleva a casa. Alguna esposa, con casa más pequeña ya habría dicho "O tus mierdas o yo", pero es un sitio curioso de ver.

El pueblo tiene dos calles con soportales castellanos perfectamente conservadas que por sí solos merecen la visita, aunque, eché en falta más vida, más en un puente que todo estaba a reventar.

Hay un hotel de lujo con un restaurante con cocina de autor. Esos milagros del marketing que ponen a un cocinero con una estrella Michelín al frente y va una vez al año a hacerse la foto y no vuelve a aparecer por el lugar, llevándose una buena pasta de los dueños del restaurante que se aprovechan de la tontería y poca exigencia de tanto Nuevo rico que en el mundo moderno somos.

Por la tarde nos dirigimos a Palencia. Ciudad pequeña de provincias con una catedral impresionante y una calle mayor como las de antes. Llena de gente paseando y comercios de los de toda la vida. Un par de Iglesias más como la de San Miguel, románica, y se nos fue la jornada sin querer.

Llama la atención una gárgola de la Catedral representando...¡un fotógrafo!. El truco radica en que el Maestro de Obras, encargado de una restauración ejecutada a principios del Siglo XX quiso homenajear a un amiguete. Licencia poética se debe de llamar a eso.

Al día siguiente, tocaba Camino de Santiago, Canal de Castilla, y villas romanas. Demasiado para ir con dos niños pero se portaron.

Comenzamos visitando la Iglesia, con pinta de Catedral de Támara de Campos, a 5 kms de Frómista. ¡Qué pasada! Parece imposible que en pueblo tan pequeño pueda existir semejante templo, pero no habíamos visto nada.

En Frómista, la Iglesia de San Martín, posiblemente el Templo Románico más bonito y mejor conservado del mundo (Con permiso de la Catedral de Jaca, por ejemplo). Además las esclusas del Canal de Castilla, Ingenio de Ingenieros que permitían salvar a las embarcaciones que transportaban grano una altura de 14 metros un par de siglos antes que el Canal de Panamá.

El Canal de Castilla, maravilla de la Ingenieria del siglo XVIII hoy solo sirve para regadio, que no es poco. Ya no navegan barcazas por el mismo, que fue para lo que se ideó y construyó.

Hacia Carrión nos encontramos con Villalcazar de Sirga, ya en medio del Camino. Una Iglesia Catedral que en nada tenía que envidiar a la de Támara. Parece mentira, la cantidad de dinero que la Iglesia ha manejado a lo largo de la Historia. Villalcazar no ha de tener 500 habitantes. Sin embargo, albergue de peregrinos y muchos restaurantes hacen ver que estas zonas pueden y saben aprovechar los beneficios del turismo, aunque sea el de mochila o el cultural.

Pueblo con resonancias templarias, la Iglesia tiene tres sepulcros y un retablo espectaculares.

Y llegamos a Carrión de los Condes, pueblo importante que atraviesa el Camino. Aquí todo hace referencia a él. Lleno de peregrinos, incluso en Octubre, multitud de albergues.

Iglesias románicas preciosas Santa María del Camino y Santiago, con un Pantócrator que recuerda a Santiago de Compostela. Y el Monasterio de San Zoilo, con un claustro donde se respira tranquilidad. Un hotel, construido al lado, permite comer en el refectorio del Monasterio.

Era justo despues de comer. Los niños estaban hartos de Iglesias, pero les propusimos la Villa Romana de la Olmeda. A regañadientes aceptaron y no se arrepintieron. Les encantó.

La Villa de Olmeda la descubrieron arando los campos a finales de los 60. Me recordó la historia de los Guerreros de Terracota de Xi'an. Se nota que la Diputación ha metido dinero, pero está precioso.

Unos mosaicos impresionantes y todo perfectamente cuidado. Altamente recomendable.

Y acabamos en Saldaña, a tomar un refresco. Los niños no podían más...y aunque a nosotros nos había encantado el día, he de reconocer que yo visitando lugares soy demasiado exigente con los míos. Reconozco que no todos pueden andar tanto como yo.
Nos quedaba un día de regreso, y lo dedicamos a los castillos. El de Torremormojón, completamente destruido, pero con unas vistas maravillosas. Se conservan los pasadizos y los niños se divirtieron paseando por ellos. Y el de Montealegre. Propiedad que fue de Maria de Molina (La tres veces reina) que solo consiguió que el Papa admitiese el matrimonio con su primo despues de un ingente soborno (Así funcionamos. Nadie dijo que todo lo que rodea a la religión y a la Iglesia haya sido siempre limpio, ni siquiera hoy en día, apunto yo)

Este castillo de Montealegre lo comenzaron a desmontar para aprovechar la piedra en la construcción del Canal de Castilla. El Estado lo compró en los 50 y, despues de servir entre otras cosas como silo de grano, lo restauraron pudiéndose visitar hoy en día.

Los muros, de 4 metros de espesor impresionan (Para que hablen de los tabiques de mi casa). La Torre del homenaje tenía 40 metros. La reconstrucción solo llegó a 20, y creedme, es más que suficiente.

De vuelta, un lechazo en las bodegas de Fuensaldaña. Al día siguiente comenzaba mi nuevo trabajo. Había que celebrarlo.

jueves, 15 de octubre de 2009

ASI ES IMPOSIBLE O CRONICA DE UN GATILLAZO

Hay que reconocerlo. Hay veces que te sientes como un toro de lidia. Eufórico, exultante. Ves que las cosas comienzan a ir bien, y ese optimismo se traslada a todas tus actividades fisiológicas.

Así me encontraba yo la semana pasada. Como diría un castizo, "no me cabía na"

Nos fuimos de viaje. Durante la conducción ya me iba relamiendo. Los últimos libros acerca del amor en la madurez que he leido en mi abundante tiempo libre de los últimos meses, plenos de ejemplos y fotografías iban a ser un pasatiempo de adolescentes. (De los adolescentes de mi tiempo, se entiende)

Una casa rural, hotelito con encanto se denominaba. Ducha con hidromasaje. Pleno de entrenamiento físico para aguantar asalto y medio por lo menos, cosa que a mi edad es altamente reseñable.

Llegamos al pueblo. Recio, sobrio, encanto el justo. Daba lo mismo. Ella me iba a hacer la ola. Lo sabía. Como en mis mejores tiempos de rugby tenía la jugada visualizada. Ni un mísero margen posible dejaba para el error.

Y entramos en la casa. Directo al baño a observar la maravilla de ducha que iba a dejar el "Ultimo tango en París" como mero anuncio de mantequilla. (A los demasiado jóvenes que consulten la wikipedia. Hay explicaciones que los clásicos no damos)

Hombre, hé visto instalaciones más preparadas. Si dejaba la mampara abierta entrábamos los dos. Ya se secaría el agua del suelo.

Salgo del baño con sonrisa pícara y allí la veo. Con cara de haber roto algún plato, y recientemente además. Y me señala lo que a mí, en mi ansia por inspeccionar el terreno de juego (Residuos de mis tiempos de árbitro) se me había pasado por alto.

El primo seminarista de la dueña de la casa (Ya entrada en años) nos miraba con cara acusadora. ¡Qué miedo! A su lado un Cristo, primo lejano de Carlos Jesús, el pirado que Cárdenas entrevistaba en "Crónicas Marcianas" (¡Schuss, schuss!), rodeado de dos angelotes que nos observaban con expresión de pecado.

El resto de la habitación no dejaba lugar a dudas. A esa casa no se iba a follar. Se podría ir a cualquier cosa, pero a follar no.

Un crucifijo presidia la habitación donde dos camas turcas, convenientemente separadas, impedían el desbordamiento de la libido. Los muelles ruidosos.

En una hornacina la foto de boda de los padres de la dueña, al lado de más santos. Perdí la cuenta de la cantidad de gente que observaba nuestra intimidad.

Y ocurrió. Tantos días de abstinencia, tanto amor concentrado que se iba convirtiendo en calostro en contacto con esa manifestación de pureza y sensación de pecado, debió de producir una reacción química en mis neuronas. Ni con electroshock fue capaz mi compañero de aventuras de enderezarse.

Menos mal que ella me conoce y sabe lo que doy de sí (O sea poco). Mucho más abajo no podía caer.

Eso sí, fuera de la habitación, en esa fria ciudad castellana, parecía que se descojonaban. Todo asemejaba a una broma pesada que los lugareños nos habían gastado. En la primera mercería que cruzamos (Tampoco es que las mercerias sean como los bares, nos debimos de cruzar con un par de ellas), ¡menuda plantilla para hacer punto de cruz!

Me estoy imaginando a la dueña de la casa repasando el mocho de la entrepierna, con perdón, mientras reza el tercer misterio.

martes, 13 de octubre de 2009

Y SEGURO QUE ME OLVIDO DE MAS DE UNO Y DE MAS DE DIEZ. GRACIAS A TODOS

Alguno me lee y otros no, pero quiero con esta entrada agradecer a todos los que me han ayudado durante estos meses en éste mi primer día.
Carmen, ni un mal gesto, ni una palabra de reproche. Un apoyo continuo. Siempre con la seguridad de que este periodo sería mucho más breve de lo que yo pensaba (No sé si agradecérselo, hoy que se acaba). María y JA por su tremenda responsabilidad "en tiempos de crisis".
Las personas que han confiado en mí, reuniéndose conmigo para ver si podía encajar en sus empresas. De verdad, gracias. Me habré visto con unas ocho o diez empresas y habré mantenido no menos de 20 reuniones en total. Y de todas he aprendido.
A la gente que se ha preocupado, compañeros, amigos, clientes, etc

No me quiero olvidar ninguno, aunque sé que es imposible, pero empezando por Antonio, constante llamándome cada dos o tres días, Pulmo, Eduardo facilitandome contactos, Chema interesándose por mí, Luis dándome apoyo moral cuando solo veía negritud en el horizonte, Jesús con quien tan buenos y malos ratos pasamos en otro trabajo, Alfredo, por creer en mí. Angélica, por no creérselo.

Tambien M.José por trajinar con mi CV en campos didácticos que nunca había pisado. Belén y Edurne por sus mensajes de ánimo. Helena, Chema y Ruth, por sus buenos deseos desde el otro lado del charco. Mis compañeros del otro trabajo, Javier, David, Alvaro, Eduardo, Ramón, Lola. Siempre se interesaron sinceramente por mi situación. Alguno de ellos autor involuntario de mi regalo más bonito. Vero por su amistad. Wu Lan por su sincero interés desde tan lejos ahora que ella tiene tambien una papeleta familiar complicada, Xie Xie.

Mi compañero del metal particular, que él sabe quién es aunque no le guste que le relacionen conmigo ni a pie ni en bici ;-) . Carlos por llevar mi CV a una fiesta. El otro Carlos por hablar bien de mí a sus clientes.

José Luis por facilitarme una oportunidad laboral que, siendo muy buena, él no aceptó, Jean Marc por ayudarme cuando se lo pedí, igual que José Manuel, quien compartió una cervezas conmigo intentando orientarme. Eugenio y David, prestos al quite si era necesario.

Maxi, y John, por escucharme. Dani, por mandarme cualquier oportunidad que pasase por delante de él.

Ramón y Ramón, Isabel, Manolo, Juan Carlos, por sus correos y llamadas de ánimo.

Pablo, por aquella invtación a comer al principio escuchando como le contaba mi vida, y todo su apoyo. Mónica, por sus indicaciones.

José por su preocupación acerca de mi situación, y toda la información recibida. Su jefe y compañero Jose, por estar tambien ahí.

Algun@ de l@s que no les gusta que se les nombre, aunque no sean galleg@s.

Al Yogui por bucear en las procelosas aguas del corporativismo. Al Marqués por pasarme cualquier oportunidad que entendía era para mí. A Angelito por pretender convertirme en Quijote e ir a buscar molinos de viento. A Tendi por querer convertirme en cantero, a mis años. Al Jevy, por sus continuas muestras de amistad y palabras de ánimo.

A Zapatero y Corbacho, porque sin su nefasta gestión, este periodo de descanso no hubiese tenido lugar. No es que yo siempre responsabilice a los demás de lo malo, pero en este caso, si no es por mí que a lo mejor soy un mal trabajador, por el de los otros cuatro millones, que alguno habrá bueno.

Al Panoli, por personalizar algo en lo que centrarme sin permitirme desviar de lo realmente importante.

Al tendero, por hacer posible que pudiese demostrarme a mí mismo lo cojonudo que soy. Un chute de autoestima continuo gracias a sus pocas acciones y muchas omisiones.

Y he de decir que, aunque haya sido un paréntesis placentero en mi vida, de verdad, es en estos momentos donde te das cuenta de la gente que realmente merece la pena.

Perdón a los que no he nombrado por puro despiste, pero habeis sido muchos, de verdad.

Un abrazo y gracias a todos. Las cervezas apuntadlas a mi cuenta.

viernes, 9 de octubre de 2009

YO TAMBIEN TENGO EXTRAESCOLARES. RITMOS CARIBEÑOS

Y es que solo a mí se me ocurre. De entre mis innumerables virtudes, creedme, no destaca el sentido del ritmo en mi cuerpo. ¿En qué momento se me ocurriría la genial idea de apuntarme a Ritmos Caribeños? pero llegó. Era mi primer día.

"¿Iniciación o avanzado?" me preguntó la chica al apuntarme. "¿Hay algo más básico que iniciación?" pregunté yo. Se descojonó, pero yo bien sabía que mi pregunta iba en serio.

28 Mujeres, un calvo y yo. Lo de Calvo no es peyorativo, simplemente descriptivo. Bien sé yo la falta de pilosidades en la parte superior de mi cabeza. Y o bien todas son primas de Zerolo o el tema está pelín descompensado.

Entre 15 ó 20 mujeres de menos de 30 años (Infantes para mí). El resto de mi edad o incluso mayores

"¿A qué vienes a esta clase?" preguntó la profesora pretendiendo romper el hielo. "¿Yo? ¡A pillar!" No se me ocurrió una respuesta menos vergonzante. Desde luego, cualquier cosa menos confesar la verdad.

Demasiada malla, y zapatillas. Yo no sabía que esto era como una sesión de Triathlon.

Y ahí que empezamos con el Cha, cha, cha. Los cuatro pasos básicos. Un autómata. Solo tenía ojos para los pies de la profesora. Mi compañera no pudo establecer contacto visual conmigo en toda la clase. No está mal, delante detras, a los lados, apertura, en fín, que esto se comienza a animar y llegá el momento del paso "sígueme"

¡Coño! Un follow me, como en los Aeropuertos, pensé yo. Pero ya me hubiera gustado. Ni con una presentación en Power Point hubiese podido destrabar mis piernas. Y seguimos sin solución de continuidad, media vuelta y la vuelta entera.

Si con el "Sígueme" ya estaba totalmente perdido, podeis imaginar complicándolo.

No sé quien era peor, si el calvo o yo, pero lo cierto es que las mujeres luchaban por no bailar con ninguno de los dos. Eso de pillar se va a poner complicado, pensé yo. Mi autoestima, podeis imaginaros, por los suelos. Ni una sola de las 28 acercándose a bailar conmigo. Todas huyendo (Lo del calvo, de todos modos, merecería entrada aparte. Yo tuve la decencia de no ponerme chandal)

Y va la pava que da clase y nos suelta que estaba muy contenta. Que en 40 minutos habíamos avanzado como otros en cuatro meses. Dije en voz alta, "¿Y no podríamos ir un poco más lento y avanzar solo dos meses?" No sé si pensó que le quería boicotear la clase.

Como venganza, los últimos 5 minutos salsa. Y ahí que veo a todas moviéndose y, a mí, que me sobra un paso. Soy incapaz de cuadrar los pasos que dan ellas con el compás de la música. Me sobra uno, y me voy a acabar cayendo de culo si sigo dando saltitos para comerme el paso que me sobra.

Su venganza, pienso yo....¡Serás canalla!

Sabía que no era una buena idea cuando me dejé embarcar en esto. No creo que resista muchas mas sesiones de humillación como esa.

jueves, 8 de octubre de 2009

LA CASA DE BERNARDA ALBA, CON NURIA ESPERT Y ROSA MARIA SARDA. ¡PASOTE!

No tenía claro si estaría o no trabajando. Por lo que, con mucho miedo, hace 4 semanas, saqué entradas para la Versión de La casa de Bernarda Alba, de Lorca, en las Naves del Español del Matadero de Madrid.

Dado que Lluis Pascual ha realizado un montaje en el que el escenario se encuentra en el medio de la sala, elevado unos 30 cms sobre el patio, saqué para el primer día que hubiese entradas en primera fila.

¡Dios! les oiamos respirar. Intenso, intensísimo, una pasada.

De Nuria Espert en Bernarda Alba y Rosa Maria Sardá como La Poncia, poco hay que decir. Todas las críticas se han volcado. Me impresionó Rebeca Valls, Martirio, hija de Bernarda y que me parece que borda el personaje.

El montaje brillante, con un escenario que se podía ver desde delante y desde detrás, como si estuviésemos sentados a ambos lados de una habitación donde se desarrolla una trama.

Se notaba que fluía pasta pública, porque no había menos de 30 actrices trabajando. Eso es poderío.

Me hizo pensar, La Casa de Bernarda Alba, despues de leer "La Mano de Fátima" de Ildefonso Falcones. ¡Qué dictadura en las sociedades por efecto del "qué dirán" o las religiones! ¡Qué distinto podría ser el mundo sin esos defectos humanos que nos llevan a perseguir al distinto o a lo establecido!

Y siguiendo esta trama se observa que lo mismo podría haber sucedido hace quinientos años o ayer por la tarde. ¡Qué daño ha hecho, y sigue haciendo en el mundo la Intolerancia! (No merece la pena dar ejemplos, no sea que un martir suicida me banee el blog, o un inspector de inteligencia de esos muy inteligentes comience a rastrear comentarios eclécticos)


Salimos realmente contentos de la obra y con ganas de repetir. Nos damos cuenta de que los hijos cada vez son mayores porque comenzamos a dejarles sin problemas un par de horas alguna noche (Perdón, como se entere el fiscal de menores nos quita la custodia)

martes, 6 de octubre de 2009

¡QUE PUTADA! (3 DE 3)

Pues sí, ¡qué putadón! porque todo lo bueno se acaba.

Alguien quiere que se me acaben las vacaciones, ahora que ya me había comenzado a acostumbrar. Que parece que alguien ha decidido que puedo ayudarle en un proyecto empresarial, y mira que me jode, con lo bien que estoy chupando de Zapatero. Todavía va a mejorar la estadística a mi costa.

Estaba en tres procesos de selección, pensando que me podía caer de los tres y...me han elegido los tres. (Dios da pan a quien no tiene dientes).

Y es una cabronada, porque yo, como buen directivo sé repartir mierda y cortar cabezas pero, tomar una decisión, me cuesta que no veas. Es mentira ¿eh?. Todavía viene Corbacho, y con el tema del buen rollito me denuncia por Mobbing.

Sin embargo, educado en el catolicismo, tengo interiorizado que hemos venido a este valle de lágrimas a sufrir, con lo que entiendo cual es mi destino aunque no me guste.

Habré realizado en estos 4 meses unas 20 entrevistas, y he descubierto algo. Así como los entrevistadores españoles, al preguntarte por tu situación de desempleo se ponen a la defensiva como pensando "Algo habrás hecho, bandido", en cuanto te entrevistas con un extranjero, siempre mira hacia delante. "Eso es pasado. En el mal sitio en el peor momento" (Me parece curioso).

Porque explicar la relación con mi jefe anterior en estas reuniones es, cuando menos, delicado. En todos los sitios te explican que hay que hablar bien de él, pero en cuanto empiezas a explicar algún detalle, no se sostiene nada, y es que hay cosas que te las crees porque las has vivido, que si no piensas que te están engañando.

Durante la penúltima reunión el pasado viernes, en una capital Europea, me preguntaron que qué diría el tendero si le llamasen. Y le contesté la verdad, que les gritaría ¡Mande! y comenzaría a balbucear porque no sabe Inglés.

Y encima le voy a tener que agradecer lo que hizo.

Me he pegado unas vacaciones de estudiante a mis años. He disfrutado de mis hijos, sin ningún estress, todo el verano. He logrado arreglar unos problemillas domésticos que tenía. Me he llevado una pastuqui y ahora me va a contratar una de tres empresas que no me han discutido ni un € lo que he pedido que ha sido más de lo que ganaba antes.

Si lo pienso, ya podía pasar esto todos los años.

Mejor pensado, deja deja, que la lotería no toca todas las semanas.

Por cierto, el del MBNA un lince. Casi tanto como el tendero.

sábado, 3 de octubre de 2009

LA TARJETA DE CREDITO DEL MBNA

"Este no es mundo para desgraciados. Si te ven débil, te comen" (Anónimo...o Belle de Jour, que ya no me acuerdo quien lo escribió por aquí)

En Barajas, hace un año poco más o menos, una simpática vendedora me coló una VISA Oro de Rumbo, cuya gestora es MBNA, propiedad del Bank of America. No tenía gastos, me ofrecían un 1% de descuento en Hipermercados, un 2 en gasolineras y un 3 en Viajes Rumbo. (Lástima, un mes despues de sacar los billetes a Nueva Zelanda, que hubiesen sido una pasta, mas de 100 eurillos)

Le comenté que tenía una American Express y dos Visas, una de ellas de empresa, pero me insistió en que no tenía ningún gasto. Andaba con tiempo ese día, le di mis datos bancarios y de trabajo y me enviaron la VISA.

Recuerdo que los dos primeros recibos no había Dios que los entendiese. Como echo gasolina en el Carrefour, un día me aplicaban un 1% por ser hiper, otro el 2 por ser gasolinera. En fin, que despues de varias llamadas sin que pareciese que nadie sabía por qué se hacian las cosas, decidí no gastar más mi tiempo por un euro al mes, poco más o menos.

Eso sí, SMS y publicidad, cada 15 días. Les llamé para que no me enviasen más SMS, que yo viajaba mucho al extranjero y el trayecto internacional de su publicidad la pagaba mi empresa. El Sistema no lo permitía, me dijeron.

Los recibos nunca fueron elevados. Solo pagaba en la gasolinera. Las compras las pagaba Carmen, que para eso es la que maneja la pasta en casa.

Las cosas de mi trabajo se van animando y hace un par de días me confirmaron una entrevista en otra capital europea (Distinta de Londres y Berlín, Jevy, o sea, otra). Ya que no quiero retrasar procesos, manifesté mi disposición a ir al día siguiente. Debido a la falta de tiempo me ofrecí a sacar los billetes yo, que ya me los reembolsarían luego.

Entré en Rumbo, saqué los billetes y al ir a pagar con la VISA de Rumbo me cargaban 9,5 €. Si el billete costaba 300 € (O sea, no era muy lejos), el famoso descuento me salía negativo.

Como eso no era lo importante, emití los billetes y llamé al teléfono que me mandan en el extracto mensual que, casualmente me había llegado esa mañana. El teléfono había cambiado y en vez de ser gratuito ya era un 90 algo. Ya me comenzó a tocar las pelotas.

Al identificarme me preguntaron una serie de cosas como donde trabajaba. Les di el nombre de mi anterior empresa pero les aclare que estaba en paro, aunque era una situación creía que muy transitoria. Les pregunté que por qué el cargo de los 9,5 € y me dijeron que ellos eran el banco, MBNA. Que no entraban en los cargos de Rumbo (Los dos logos aparecen tanto en la tarjeta como en las comunicaciones). Que si quería explicaciones que hablase con Rumbo (Otro número 902). Además, el operador que me atendió me comentó que iba a pasar la nueva información al departamento de riesgos del banco. Que se pondrían en contacto conmigo en 24 horas porque mi situación había cambiado. Le contesté que la información la había dado yo libremente porque nada tengo que ocultar pero que si recibía esa llamada yo tambien decidiría qué hacer con la tarjeta.

Ya sabeis que un banco es ese extraño ente que te ofrece créditos cuando no los necesitas y te los niega cuando los necesitas, pero así está montado el sistema, para que se puedan pagar pensiones de 60 millones de € a algún afortunado trabajador.

Al día siguiente, estaba saliendo hacia el aeropuerto y sonó una llamada. El departamento de riesgos de MBNA. Les dije que me pillaban yendo hacia el aeropuerto, que la llamada no era oportuna en ese momento y que me llamasen a los dos días. El "riesguero", sordo ante mis comentarios, comenzó con que le habían facilitado una información y tenía que contrastarla. Le insistí en la inoportunidad del momento pero como no cejaba le comenté que estaba en paro, sí. Que tenía alguna oferta. Que en ese momento estaba volando para ver si se podía analizar otra. Que no creía que la situación fuese a durar más de algunas semanas. Que no tenía hipotecas ni créditos y que llevaba en esa situación casi 4 meses y había pagado las cuotas religiosamente desde el principio hasta la fecha.

Me preguntó si ya tenía las ofertas firmadas y si tenía otros ingresos como rentas o demás y le comenté que las estaba analizando, y que suponía que firmaría en breve, y que cobraba 1294 € de paro más el sueldo de mi mujer. Que no le veía mayor problema.

Cuando ya me preguntó el sueldo de mi mujer (A todo esto, tarde para el aeropuerto) ya le dije que la tarjeta era mía y que a él le importaba tanto el sueldo de mi mujer, como a mí el suyo. En ese momento me dijo que en esas circunstancias me iba a bloquear la tarjeta.

Le contesté que no, que me pasase el cargo del último mes y que la anulase (Y que se metiese la tarjeta por el culo, tambien le dije, pero, aunque la conversación está grabada, me da verguenza reconocerlo). A todo esto, incansable me contestó que para anular la tarjeta (Nada dijo de su culo) debía de llamar al famoso 90 algo y ahí ya me cagué en todo lo que se meneaba y le colgué.

Inmediatamente destruí la puta tarjeta del MBNA y me fui al Aeropuerto.

El Sistema es tan listo que, como todos somos números, dejan al cargo de estos imbéciles sin ninguna capacidad de análisis las decisiones que nos afectan (A mí, la verdad, esta tarjeta, más bien poco por no decir nada).

Pero el Bank of America, que de cuidar riesgos ha debido de aprender lo suyo en el último año, porque anteriormente ha sido uno de los Bancos que más dinero ha recibido del contribuyente americano para poder evitar la bancarrota (Se acaba de volver casta La Calderona), ha hecho un negocio estupendo, porque acaba de perder un cliente que nunca le ha dado ningún problema por no analizar el riesgo REAL de una tarjeta que cargaba de media unos 200 € al mes (Solo de gasolina, chicos).

Espero del buen juicio de estos gilipollas que no me vuelvan a mandar un SMS ofreciéndome un crédito inmediato, porque me cago en su puta madre, y no por teléfono, que sé donde viven.