La poca querencia de los franceses por el agua no es una
leyenda urbana propagada por sus envidiosos vecinos del sur. Ellos mismos se
han encargado de extenderla a través de sus gobernantes
Es bien sabida la carta escrita por Napoleon a Josefina;
“Ne te lavez pas, J’arrive dans dix jours” (No te laves, que
llego en diez días), aunque otras fuentes apuntan a Luis XV en una carta a su
amante Mme Pompadour ;
“Ne te lavez pas, J’arrive dans deux moins”, cambiando diez
por dos (Una mejora apreciable para nuestros estándares de limpieza), aunque
días por meses, en fin.
No sabemos si son dos variantes de la misma carta o dos
cartas diferentes, lo que sí sabemos es que ninguno de los dos nunca desmintió
las mismas y esto, como sucede en los acontecimientos periodísticos de hoy en día, ya
las otorga validez….
No parece que el enviar estas indicaciones por escrito
crease graves problemas a los redactores de las misivas con las receptoras de
las mismas. (No me imagino enviando un emilio a Carmen con este sucinto mensaje
y que no tuviese consecuencias en forma de agresión física). De lo que hay que
deducir que era un hábito (más bien, falta de él) apreciado por ambas partes.
Cuando se habla con un gabachoise de estos temas (Y sabeis
que estoy rodeado), te miran con cara de extrañeza, de esas que te indican…”¿A
mí qué me cuentas, tio?”, aunque todos aquellos que, debido a un Erasmus, o
fatal accidente hayan tenido que compartir piso con un habitante del norte de
los Pirineos….en el Norte de los Pirineos, recordarán como, a partir del tercer
minuto de ducha, si ya era el segundo día que lo hacías, te llamaban la
atención ante ese indudable derroche.
Los tiempos han cambiado y, consiguientemente, no tengo
registradas quejas que el simple hecho de ducharse, sin pasarse en los tres
minutos, incluso 4 veces por semana, hayan provocado comentarios de extrañeza
por parte de nuestros amables vecinos.
Sin embargo la fama les precede y, así como yo tengo que
continuamente desmentir a mis compañeros de París, que entre mi fondo de
armario se encuentre un traje de torero, o que llueva o nieve, haga frio o
calor, la siesta es una costumbre imprescindible en nuestra jornada laboral
(Por supuesto, siesta de PPPO o, lo que es lo mismo, de pijama, paja,
padrenuestro y orinal, y no esas mariconadas de siesta de 3 minutos de
trasposición en sofá que los minimalistas de hoy en día pretenden imponer),
ellos han de luchar contra el imaginario popular.
¿Y por qué traigo hoy estas reflexiones? ¿Porque vengo de
París donde he recibido hasta en el cielo de la boca? (Se deben de creer que la
crisis me la acabo de inventar yo), ¿por las simpatías que sabeis que les
profeso?
No, no y tres veces no. Tengo muchos defectos, conocidos y
no, pero no soy un ser tan parcial, despreciable y vengativo. Sin embargo, en
mi hotel en Paris, (Hotel de una cadena francesa reconocida entre aquellas con
una adecuada relación calidad/precio…para ser Paris, o sea, que comienza en 120
Napos sin desayuno) es la tercera vez que no me funciona el agua caliente a
pesar de ser un hotel nuevo. Y esto ya no es un fallo técnico como nos han
vuelto a repetir a los clientes extranjeros del hotel (Ningún francés vimos
protestando). Esto es un detalle del hotel para con sus clientes nacionales,
con el fin de proveerles de una excusa y que no se sientan en la obligación
imperiosa de tener que llevar a cabo tan higiénico e incómodo rito matinal.
Eso sí. No sabían que mi director financiero y yo somos del
norte, y, para joderles, nos hemos duchado con agua fría. ¡Qué se fastidien!
Y es que, para cabezones….
21 comentarios:
Jajajaja en mi última estancia en París , en un hotel también conocido bajé al segundo día a preguntar el motivo de que no nos hubieran repuesto el botecito minúsculo de gel. Y me mira la chica y me dice con una sonrisa... "Pero no le pusimos uno cuando llegaron anteayer?" Y cuando vió que la miraba con cara mediobuena añadió... "claro, será que se ha lavado el pelo porque normalmente dura mucho".
En fin, bromas o no bromas, se lo ganan a pulso o tal vez les saquemos punta a todo. Pero nos reímos.
Besos
PD. Eso sí, yo agua caliente tenía!
Silvia...eres una derrochona......
;-)
Pues yo no tenía ni idea de que fueran así. De lo que se entera uno viajando en tu blog, aunque debo de reconocer que me gustan más las entradas dedicadas a tus aficiones culinarias ;-)
Fernando...me da que a ti tampoco te gusta mucho el agua encima de la cabeza....con jaboncito...ya sabes...so zampabollos
Si, corroboro eso de que lo franceses se lavan poco
Lo de ducharte con agua fría me recuerda los días del Cisneros cuando después de un partido de rugby con barro te tenías que duchar con agua fría y en invierno porque no tocaba tener agua caliente.
Santiago...y creo que, en el caso de Francia, sabes de lo que hablas....
En fin...te van a declarar persona non grata
;-)
ja ja Eres genial Kikas....yo también me ducharía (y 3 veces al día para hacerles el gasto de agua) con la fría..jaja Si cuando el río suena....jaja Besos y bienvenido
No sólo es cosa de la zona parisién (aunque yo salí con una gabacha de las Landas que era de lo más limpio que figurarse pueda) que por los londones también sucede eso de que las duchas diarias no son cosas conocidas. Lo entiendo en Inglaterra, con lo que llueve y el frío que hace en invierno pero en la Francia no, que tiene zonas de calor axfisiante. Pero tampoco nos extrañemos que hasta no ha mucho lo de ducharse una vez a la semana aunque no hiciera falta también fue costumbre de estos lares.
Salu2
Winnie, no exageres....
Una vez suficiente, no vayamos a pasarnos de vueltas
;-)
Juan Carlos, siempre lo supe....
Eres un gabacho de incognito que me has esperado pacientemente hasta que has podido cargarte un post mio, envidioso...
Arrieritos somos
;-)
Kikas buenos días Hay una cosita para ti en mi blog....Que tengas un día estupendo Besos
Sabes que de las primeras cosas que hago por las mañanas es pasarme por tu casa. Lo he visto, pero me ha dado un poco de miedo retirarlo...
No habrá que pagar nada, ¿no?
;-)
Va ser cosa del hotel. Siempre que he estado, lo hice en hoteles modestos y siempre he conseguido ducharme con agua caliente. Aunque soy del norte, de masoquista sólo con los azotitos de mi señora y con el agua de La Lanzada.
Así que ya sabéis, menos estrellas y guardaros los dineros para el Folies Bergere, o para vino.
No César...estrellas pocas, créeme, escasamente dos
Pero cuando vamos a trabajar se necesitan cosas que de turismo no...conexion a internet en la habitacion por ejemplo...
Pero reconozco que sí...que será cosa del hotel....que es una cadena francesa
;-)
Creía que iba a salir el monstruo que habita en el lago.
El castillo te gustó más por fuera que por dentro, no sé...
Oye, la familia Monster, a lo mejor, tenía los calcetines remendados porque carecía de dinero para comprar unos nuevos.
Algunas personas cosen...
No me gusta hacer la siesta y solo me ducho con agua fría en verano, en la piscina.
No me puedo creer que sean tan guarritos en París.
Mela, creo que se te estan traspapelando las entradas y los comentarios....¿Eilean Donan quizas?
Por lo demas, creetelo...guarros hasta decir basta...
No entiendo qué hace este comentario aquí, te aseguro que lo he dejado en la entrada de Eilean Donan.
¡Debe ser culpa tuya, algo raro has hecho!
Ya....
A la torpeza le llamamos maldad....
No exageres, Kikas, no te he llamado malvado.
¿O eres tú quien me está llamando torpe?
Ya no lo sé, ya me has liado.
Nunca imagine que pudiese liarte.....
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