viernes, 9 de octubre de 2009

YO TAMBIEN TENGO EXTRAESCOLARES. RITMOS CARIBEÑOS

Y es que solo a mí se me ocurre. De entre mis innumerables virtudes, creedme, no destaca el sentido del ritmo en mi cuerpo. ¿En qué momento se me ocurriría la genial idea de apuntarme a Ritmos Caribeños? pero llegó. Era mi primer día.

"¿Iniciación o avanzado?" me preguntó la chica al apuntarme. "¿Hay algo más básico que iniciación?" pregunté yo. Se descojonó, pero yo bien sabía que mi pregunta iba en serio.

28 Mujeres, un calvo y yo. Lo de Calvo no es peyorativo, simplemente descriptivo. Bien sé yo la falta de pilosidades en la parte superior de mi cabeza. Y o bien todas son primas de Zerolo o el tema está pelín descompensado.

Entre 15 ó 20 mujeres de menos de 30 años (Infantes para mí). El resto de mi edad o incluso mayores

"¿A qué vienes a esta clase?" preguntó la profesora pretendiendo romper el hielo. "¿Yo? ¡A pillar!" No se me ocurrió una respuesta menos vergonzante. Desde luego, cualquier cosa menos confesar la verdad.

Demasiada malla, y zapatillas. Yo no sabía que esto era como una sesión de Triathlon.

Y ahí que empezamos con el Cha, cha, cha. Los cuatro pasos básicos. Un autómata. Solo tenía ojos para los pies de la profesora. Mi compañera no pudo establecer contacto visual conmigo en toda la clase. No está mal, delante detras, a los lados, apertura, en fín, que esto se comienza a animar y llegá el momento del paso "sígueme"

¡Coño! Un follow me, como en los Aeropuertos, pensé yo. Pero ya me hubiera gustado. Ni con una presentación en Power Point hubiese podido destrabar mis piernas. Y seguimos sin solución de continuidad, media vuelta y la vuelta entera.

Si con el "Sígueme" ya estaba totalmente perdido, podeis imaginar complicándolo.

No sé quien era peor, si el calvo o yo, pero lo cierto es que las mujeres luchaban por no bailar con ninguno de los dos. Eso de pillar se va a poner complicado, pensé yo. Mi autoestima, podeis imaginaros, por los suelos. Ni una sola de las 28 acercándose a bailar conmigo. Todas huyendo (Lo del calvo, de todos modos, merecería entrada aparte. Yo tuve la decencia de no ponerme chandal)

Y va la pava que da clase y nos suelta que estaba muy contenta. Que en 40 minutos habíamos avanzado como otros en cuatro meses. Dije en voz alta, "¿Y no podríamos ir un poco más lento y avanzar solo dos meses?" No sé si pensó que le quería boicotear la clase.

Como venganza, los últimos 5 minutos salsa. Y ahí que veo a todas moviéndose y, a mí, que me sobra un paso. Soy incapaz de cuadrar los pasos que dan ellas con el compás de la música. Me sobra uno, y me voy a acabar cayendo de culo si sigo dando saltitos para comerme el paso que me sobra.

Su venganza, pienso yo....¡Serás canalla!

Sabía que no era una buena idea cuando me dejé embarcar en esto. No creo que resista muchas mas sesiones de humillación como esa.

6 comentarios:

Belentxu dijo...

Kikas: me alegro mucho de que vuelvas a trabajar, o más bien debería alegrarme, porque trabajar es muuuuuuuy duro.
Comprendo perfectamente tus apuros en el baile, creo que a mí me sobrarían más pasos.
Animo y alquílate la peli "Shall we dance"!
Recuerdos

Kikas dijo...

Lo que es duro es no trabajar pero, que yo te diga esto cuando lo que he tenido han sido unas vacaciones largas creo que no es meritorio.
El otro día, un buen amigo, responsable de Recursos Humanos, me dijo que había tenido la actitud que hay que tener para afrontar este problema. Supongo que porque se va a solucionar antes de que pese (Espero empezar mañana. Ya veré si al llegar me dicen que no hay contrato, jejeje)
Por lo demás, el baile, creo que será más duro que la vuelta al trabajo
;-)

Anónimo dijo...

Sin guarachar no hay gossssadera. BdJ y anónima

Anónimo dijo...

Ahh! ya se, lo que te pasa a ti es que te sobra una pierna!!! BdJ y anónima2 (las de los bolsazos)www.youtube.com/watch?v=FrhM6eq9OLI

Kikas dijo...

Pues si antes solo tenía a BDJ, ahora me viene en estéreo con una amiga que me juego un huevo, y no lo pierdo, a que juntas habeis de ser como para meterse debajo de la alfombra.
Nada, nada, bienvenidas de nuevo.
Las últimas noticias son que el calvo ya no aparece, se ha hartado. Y a mí me faltan dos telediarios para seguir su mismo camino porque mi sentido del ritmo roza los cero grados Kelvin, tambien llamado cero absoluto.
En la clase de ayer, 28 mujeres y yo, y nadie queriendo acercarse a bailar conmigo ¿Se puede tener una experiencia más frustrante?
Para colmo le tuve que decir a la profesora que si no tenía más gente para fijarse en ella, que me estresa, me estresa mucho.
Por último, si sigues este blog sabrás que no, no me sobra ninguna pierna. Si acaso al 23. Yo con dos voy que pedaleo....

Mela dijo...

Cha, cha, cha... delante, detrás, a los lados, saltitos para que no te sobre un paso... y cuidado con no caer... jajaja
Kikas, espero que mi risa no sea motivo para que tu autoestima caiga al suelo ;-)
De todos modos, si en 40 minutos avanzaste lo que otros en 4 meses... el resultado fue positivo
Tal vez eres demasiado exigente contigo mismo
Cha, cha, cha ;-)