miércoles, 4 de junio de 2008

QUE USTEDES NI NOS VENDIERON….USTEDES NOS REGALARON

Acabo de pasar una semana inolvidable con unos invitados cubano-brasileño-venezolanos en España. Siempre es interesante saber la visión que sobre nosotros tienen otras personas, en este caso tan cercanas como las cubanas.

Pues bien, lo que más me llamó la atención de las muchas conversaciones que compartimos fue la desazón que expresaban ante lo que siempre habían estudiado en el colegio. España, a Cuba, ni la vendio a los gringos. Directamente la regaló. Y lo decían con tristeza y convencidos. Yo les decía que eso no era cierto. Que España sufrió una depresión Nacional ante la pérdida de Cuba y de Filipinas que le duró varias décadas. La famosa generación del 98. No les pude convencer. Ni enumerando la catástrofe Naval ocurrida en la bahía de Santiago donde se encontraba todo lo que quedaba de la “Armada” (Por decir algo) Española, y nos bloquearon la salida a mar abierto un puñado de barcos Yankis, y debido a ese honor quijote español, se tomó la decisión de intentar salir a pelear, y uno tras otro fueron saliendo de puerto los barcos españoles, y uno tras otro fueron siendo hundidos, que los Yankis estaban en posición de tiro, y nosotros solo podíamos ir a su encuentro.

Y esto lo cuentas con esa cercanía que da el hablar entre hermanos, que hace mucho tiempo que no se ven. Y todos nos vamos descubriendo uno a otro.

Me siento bien entre cubanos. Graciosos, despegados, cercanos. Sí, pasan necesidades, pero afrontan la vida con alegria e ingenio. Otra cosa es llegar a sus aeropuertos. Tremendamente amables, pero te das cuenta de que no estás en un país normal. Te hacen una ficha completa. De repente, te toca como a mí esta mañana, inspección rutinaria…y te has cagado. No porque vaya a ser muy compleja…sino porque se hace con ritmo caribeño “amigo…no se impaciente, hay tiempo”

“Ya, es que me he levantado a las 3 de la mañana, son las 2 de la tarde y no sé qué hacen que no empiezan”

“Tiene que venir el compañero interrogador” (Que viene, cuando llega, nunca antes) El aduanero, mientras esperamos al compañero interrogador, me dice, "amigo, no se ponga usted nervioso" A lo que yo, hasta los huevos de esperar le contesto, "no, yo no me pongo nervioso, quien me pone nervioso es usted".)

Vuelvo a mis invitados, gran labor de educación que tiene este pueblo. Cultura con mayúsculas. Comparados con un gringo medio….iba a decir una barbaridad.

Todos hacen gala de sus abuelos españoles. A la menor oportunidad te lo dicen, de donde eran, o que tienen contacto con algún primo de su abuelo.

Disfruto enseñando Madrid. Aunque no sea de aquí, pasear Madrid me gusta y, creo, que no soy mal cicerone. Muchos libros de historia leidos, anécdotas escuchadas de gente que sabía mucho más que yo, y pasión por mostrar y agradar.

Ha sido una semana espectacular, ¿para qué vamos a engañarnos? Tapas y paseos por Madrid, Visita a una bodega en La Rioja, Pintxos en Bilbao. Ahora es cuando puedo entender que los bilbainos se sientan orgullosos de serlo. Que antes, y la mayoría de mis amigos eran de Bilbao, te lo decían y te descojonabas, con la cantidad de mierda por metro cuadrado que almacenaba esa ciudad. Hoy, ¡Dios! Da gusto verla ¡Temblad Donostiarras! Joder, menos mal que estoy a 450 kms. Si antes no había Dios que los aguantase hablando de Bilbao, hoy, y con razón, debe de ser nolotil en vena.

Visita a varias villas medievales (Lerma, Laguardia….) flamenco y…mercadillo (Gran acierto haber decidido incorporar a Carmen la última noche y mañana de la visita) ¡Se volvían locos con las cosas que encontraba y sus precios!

Yo creo que todo les gustó pero, las dos cosas que más les marcaron fueron la Bodega y el flamenco.

El Flamenco, bueno, es un clásico en estas visitas. Lo de la Bodega sí que les rompió los esquemas porque, aunque no entiendan, a todos les gusta el vino y, si les organizas una visita explicando el proceso de elaboración, como se disfruta, maneras de beber….Me han vuelto a América enólogos todos.

Lo más kistch, salsa en un bareto de Laguardia regentado por alguien que se casó con una dominicana. Ahí que entramos a las 12 de la noche toda la troupe (Bueno, toda no, porque a Trini, una simpática Ingeniera venezolana, el vino le debió dar sueño…y bien que lo sintió a la mañana siguiente cuando le contamos la fiesta que montamos.)

Los parroquianos, cincuentones solteros alucinaron con nosotros. Ahí estaban un par de cubanas amigas de la mujer del dueño, y se pensaron que íbamos a robarles eso que ellos no iban a conseguir. Miradas de, “forastero, no te pases un pelo que aquí somos muy brutos”

El Crack de la noche, Anderson, el Brasileño, que movió a Yuletsy, nuestra amiga cubana como una peonza, mientras el solo movia el dedo con el que la hacía dar vueltas. Bueno, Yuletsy me hizo bailar hasta a mi, que cuando se lo conté a Carmen, se agarró un mosqueo de pelotas, porque hace 20 años que no lo consigue. Y mira que le expliqué que eran negocios. Nada, esta chica me conoce demasiado bien. Sabía que era que me lo estaba pasando de cojones. Marco el venezolano bailando salsa y Paulo, mi hermano negro cubano(que a mis hijos les tendré que explicar que el abuelo no hizo ninguna travesura en Cuba), bailando casino, o sea, como Marco, pero boca abajo, o algo así, según me explicaron

Acabamos a las 5 de la mañana que no nos lo creíamos, bueno, en el bar tampoco. Cuando nos íbamos, un panoli, con todos los aperos de Borroka militante ¡En Laguardia! comenzó a dárselas de vasco y me enhebró tres frases que yo contesté adecuadamente. Al ver que no me impresionaba su dominio de la Lengua de Aitor desistió. ¡Y es que siempre tiene que haber un gilipollas suelto!

¡Y el mercadillo! Los cubanos se iban el sábado a las 5 de la tarde. Había llevado a Carmen a acompañarnos al flamenco la noche anterior (Que no la había visto en toda la semana) Sabía que iba a congeniar con Yuletsy y, además, sabía que les podía ayudar con los encargos que traían. Es la primera vez que Carmen me acompaña en un sarao de trabajo de estos. Sabía que todos nos íbamos a encontrar a gusto.

Los venezolanos tambien querían, pero ellos se iban a las 2.

Fuimos a buscarles al hotel y, no me equivoqué. ¡Qué habilidad para encontrar gangas!

La conclusión es que, incluso el último día fue redondo. Y si, además, durante toda la semana se les ha dado un training intensivo de producto….vamos, que así me gustarían a mí los cursos de formación. Ya, si además vendo algo, me retiro.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Has estado en Lerma?

¿Has visto el reloj medieval del Muyayo?

Kikas dijo...

Solo tenía ojos para la morcilla, tio, ya sabes...soy un cacho de carne con ojos sin ninguna sensibilidad

Mela dijo...

Hola, Kikas, no hay duda de que te encuentras a gusto entre cubanos
Está bien afrontar la vida con alegría e ingenio
Hasta bailaste... no sé cómo te pudo convencer Yuletsy