sábado, 29 de noviembre de 2008

UNA POTA EN EL GRAN CAÑON DEL COLORADO

Todos tenemos material gráfico para hundir la carrera de más de uno. Un actual senador temblaría si alguno de los que le conocimos y tomamos más que mostos con él, hiciéramos públicas algunas manifestaciones impresas de aquellos años de vino, mucho vino, y alguna rosa.

Yo tambien. No sólo aquellas con las que amenaza el Jevy .(Que vamos a ser serios, a mi edad verme con leotardos otra vez es algo que no me parece edificante, en primer lugar de cara a la educación de mis hijos).

Todavía recuerdo a mi pobre madre, que en Paz descanse. Vino a visitarme y le pedí que me comprase unos leotardos para la tuna. Nos fuimos a una tienda y pidió unos pantys para mí. La dependienta, mirándome y con cara de estar pensando"menudo julandrón", le preguntó que si los quería estampados. Mi madre, que tenía una coña que deberíais haberla conocido, se descojonó en su cara mientras le decía que no, que tupiditos, que eran para que no pasase frio en invierno.........cuando iba con la tuna (Despues de una pausa lo suficientemente larga como para seguirle tomando el pelo a la dependienta)

(Entienda la juventud, que hace 25 años todavía no se había aprobado la Ley de Matrimonios Homosexuales de Zapatero, y que había cosas que llamaban más la atención). (Hago la aclaración no me pongan en una lista de blogs homófobos y la jodamos, que actualmente hay que tener un cuidado con lo que se dice....)

Bueno, que me estoy dispersando. Os decía que no solo hay ese tipo de material gráfico circulando por ahí, espero que no todavía en el ciberespacio, sino mucho otro, producto de algún viaje profesional o de placer.

A Las Vegas ya he perdido la cuenta de las veces que he ido a la feria del NAB. Generalmente, mi actividad es Feria hasta las siete de la tarde, una ducha, paseo por alguno de los hoteles o, ultimamente, dado el tipo de cambio, alguna compra. Una cenita y una copa en alguno de los miles de garitos. Alegrar el ojillo y a dormir que es lo mejor que podemos hacer.

Lo de Las Vegas, creo que ya lo he contado, es la esquizofrenia americana en estado puro. Es la auténtica ciudad del vicio. En Las Vegas, la prostitución no solo está prohibida, está perseguida. Ahora bien, por prostitución se entiende penetración (O sea que Clinton no estaba desencaminado) Cualquier otro tipo de actividad lúdica...ya sabeis. Para los que les da un apretón de meterla, a una horita en coche, teneis el Chicken Ranch. Un prostíbulo que se encuentra en un terreno de unas 15 Hectareas y guarda proporción con el terreno o sea que.... que no está nada mal la parcela.

Cuando éramos estudiantes y 23, Jevy, el Senador (glups, perdón) y muchos más, nos intercambiábamos revistas un poco subidas de tono, yo siempre me pregunté por qué a esas chicas no las veía por la calle. Años tardé en descubrir la razón...¡Todas estaban en Las Vegas! La ciudad del recauchutado. No sigo por aquí no vaya a decir algo de lo que luego me arrepienta.

Bueno, un año de esos decidí que debía ver algo del desierto de Nevada, y, convenientemente informado, busqué un vuelo para sobrevolar el Gran Cañón. Quisieron acompañarme dos clientes y amigos (Uno de ellos el cuñado de mi anterior jefe, por cierto) Ya sabeis que los clientes el tema de las Ferias se lo toman de una manera un poco más relajada. Yo, directamente, en 15 veces que haya ido, me he escapado una mañana.

Nos fuimos en bus hasta Boulder City, que es uno de los sitios donde tienen aeródromos para sobrevolar el Gran Cañón. Era un día con un viento de la leche. Eso quería decir que, en vez de un avión grande, de unas 25 plazas, volariamos en uno pequeño, de unas 8.

Nada más llegar yo me empeñé en que quería ir en el asiento del copiloto. ¡Menuda perra!Lo logré. El piloto al verme me preguntó si me mareaba, ya que el avión se iba a mover un poquito. Le miré con cara de suficiencia. Tenía más millas que él, seguro, ¿de qué me estaba hablando?

Despegamos.

El paisaje era una maravilla. Vimos la presa Hoover, y comenzamos a sobrevolar el Cañón. Paredes cortadas a pico, todas las gamas de ocres que os podais imaginar. El piloto acercándose a las paredes con el fin de que la impresión fuese superior.

Debido a las corrientes de aire eso se empezó a mover como un tiovivo y, al estar separado de las alas, pivotaba mucho más. Comencé a ponerme malísimo. El cuñado de mi ex-jefe, un tio encantador, es el dueño de una productora de video. El muy cabrón, que estaba sentado detras del piloto, en cuanto comenzó a verme amarillo, cogió su cámara de video. Y ahí le teneis, tomándome unos primeros planos mientras cogía la bolsa, metia mi carita dentro, en fin, que me ahorro los detalles.

A todo esto, el piloto no me ahorró ni un segundo de sufrimiento. Realizó todas las piruetas que se le ocurrieron mientras bastante hacía yo para intentar mantener el contenido de la bolsa en su interior.

Una vez aterrizado, le di las gracias por el paseo. Mis dos acompañantes se partían el culo.

En el autobús de vuelta me enseñaron la película. No lo podía creer. Intenté que la borrasen. Imposible.

Desde entonces, siempre he tenido un comportamiento exquisito con ambos dos. Yo a los clientes siempre les trato bien pero estos...estos...estos tienen un plus, y a lo mejor no es por ser el cuñado de mi ex-jefe.

jueves, 27 de noviembre de 2008

SUSTITO Por Juan A., mi hijo

Os he hablado a menudo de Carmen. Mi familia se completa con dos hijos maravillosos. María tiene 13 años. Ya es una mujer. Estamos en esa edad que continuamente porfiamos a ver quien mea más lejos (Ella, lo que no sabe es que, por razones fisiológicas, yo siempre podré mear más lejos que ella. Bueno, por eso y porque con 13 años, yo era un auténtico hp. Lo que hay ahora son unos aprendices de chicos malos)

Juan A. tiene 8 años. Es un niño con un mundo interior alucinante. Me recuerda mucho a mí cuando tenía su edad. He intentado que jugase al Rugby, pero no le hace mucha gracia. Le gusta esquiar conmigo. De deportes poco más.

Carmen continuamente dice que, por la que tengo debilidad es por María, y aunque continuamente se lo rebato, a ella no le entra en la cabeza (Ella dice que María me lo perdona todo y, como padre, creedme, soy exigente)

De verdad, adoro a mis dos hijos y, como alguna vez escribí en este espacio acerca de Carmen, creo que, si un día falto, me gustaría que ellos tambien supiesen lo que significan para mí.

El otro día estaba repasando el cuaderno de Lengua de Juan A. En 30 páginas tenía una falta de ortografía y, leerlo me hizo sentirme orgulloso de él como padre.

Había escrito esta redacción. No he cambiado ni la coma que aparece en la misma. Espero que disculpeis este ataque de baba paterna. Tiene 8 años y, a lo mejor, algún día un investigador descubre que este fue su primer texto publicado.



Sustito, un nombre adecuado para un fantasma menos para Sustito.

Sustito era un pequeño fantasma que no asustaba a nadie. Sustito como siempre iba a la escuela de monstruos con mala gana pero hoy mas que nunca porque tocaba clase de sustos.

Sustito suspendio. Un dia que era fiesta y nadie iba a la escuela, unos niños entraron en la casa de Sustito y vieron llorar al pobre fantasmita. Sustito les dijo que había suspendido en la clase de sustos. Los niños le dijeron que dar sustos no era mas importante que hacer amigos y el ya tenia dos.

lunes, 24 de noviembre de 2008

SEIS JABALIS Y DOS CERDOS (O CRONICA DE UNA TXOKADA)

Mis amigos de Murguia son vascos, muy vascos. Cuando se propuso que nos deberíamos de reunir a cenar hice una sugerencia...
"¿Por qué no nos juntamos con chicas?"

Todos se me tiraron al cuello. Lo mas suave que me dijeron fue que llevaba demasiado tiempo en el exilio y que estaba perdiendo los fundamentos. Al resto de comentarios, y despues de la Ley de matrimonios homosexuales aprobada por el Gobierno Zapatero, dudo mucho que se pudiese aplicar el calificativo de politicamente correcto.

Ante mi falta absoluta de éxito no insistí. Hacía mucho tiempo, demasiado, que no nos reuníamos todos. Seguro que era divertido.

Monté a mi familia en el coche y nos fuimos a Vitoria. Ellos podrían ver a los primos. Tenía permiso para no aparecer hasta la hora de comer del día siguiente. Tato ya me había ofrecido dormir en su casa y, teniendo claro que había cubil, ya daba lo mismo si dormíamos ....o no.

Nos juntamos un montón. Ina y su hermano Tato, Joseba, Pedro y Guillermo, los Apodaca, Juan y Ramón, Rafa, Jesus Mari, Alvaro y yo. Lo mejor de esto es que la cena la acordamos en tres días. Si llegamos a pensarla tres meses antes seguro que no sale. Había gente con la que no coincidía desde hacía más de 15 años.

Fui de los últimos en llegar. Lo primero que hicieron fue pedirme dinero, supongo que para seguir pagando sus rondas ;-)

Faltaba Alvaro. Conociéndole, y sabiendo que este fin de semana le tocaban niños....en Sanlucar de Barrameda (O sea, solo a unos 1000 kms), comenzamos a pensar que era vacile

Falsa Alarma. El muy cabrón se había quedado a ver la Copa Davis y apareció cuando nos íbamos a otra sacristia.

Por la calle, en medio de la lluvia, una txaranga de música dando la lata. Hablamos con Ina y Tato, agradeciéndoles la organización. Sin embargo les dijimos que la txaranga era excesiva. No tenían nada que ver con ella ;-) (Un grupo de montaña de cumpleaños)

Dentro de los 11, hay un grupo que mantenemos la relación por correo electrónico. Nos sirve para mandarnos de vez en cuando algún correo guarro y hacer risas. Cuando Guillermo se enteró preguntó que qué era eso del correo electrónico...Que si le podíamos incluir en la lista con su número de fax.

En todas las reuniones hay un motivo para el descojono. Ya lo teníamos.

Joder, seguíamos tomando vinos. La verdad, para ser un Sábado de Noviembre había un ambiente de miedo en el pueblo, pero...eran los de siempre, con 20 años más. Los que acaban de venir a vivir a Murgia, deben de andar pagando la hipoteca y salir a tomar vinos no se debe de estilar.

En un bar me comenzaron a entrar mozas...de mi edad. ¡Qué subidón en mi nivel de autoestima! Yo no sabía que era tan popular.....¿De verdad lo fui hace 20 años y no me di cuenta? ;-) Lo más parecido a echarte los trastos que yo recuerdo...a lo mejor es que he perdido la costumbre o....nunca la tuve.

Ina me echó un quite de los que se agradecen...y él sabe a lo que me refiero porque, yo en su lugar le hubiese aplicado el descabello. La diferencia entre él y yo, aparte de que tengo mucho más pelo, es que él siempre fue buena persona.

Acabamos el viacrucis de rigor....Llegamos hasta "el Antolín" Debían de ser casi las 11. Habíamos de ir al Txoko a cenar.

Para los que no lo sepais, un txoko es una sociedad gastronómica solo para hombres, muy populares en el Pais Vasco. Actualmente hay algunos mixtos, pero no es lo habitual y ya os he dicho que mis amigos son jóvenes...pero vascos ;-) (Bueno...y jóvenes, jóvenes tampoco demasiado)

No sabíamos si cocinar los seis jabalis, que aparecen junto a los dos cerdos en la foto de abajo (Se me ha olvidado deciros que casi todos son de Bilbao, o sea, cualquier exageración viene incluida en el precio de la cena), pero al final decidimos que en desollarlos se nos iba a hacer tarde...y nos conformamos con el menú que Tato, amablemente, había pensado para nosotros: Ensalada de Rúcula con foie, jamoncito, anchoas, un bacalao que quitaba el sentido, para el que se quedase con hambre (O sea todos, por pura gula), chuletón, y queso con membrillo. Por poner una pega, me faltaron unas nueces con el queso ;-)

No cantamos esa bonita canción de profunda letra y compleja melodía. Dejadme que recuerde. Decía algo así como

"Debajol puente, de Rotigán
Nos pusimos a cagar mecaguenriau"

Como buenos vascos, siempre cantamos esta canción con suma sensibilidad y, en un grupo de 11, por supuesto, a 11 voces, o sea, cada uno a su pedo....y nunca mejor dicho.

A Pedro se le ocurrió que debíamos haber invitado a las chicas. No a las nuestras sino, a las de entonces. Siempre tuvo una visión limitada de la vida. Si las invitamos...¿De quien cojones nos reimos como ha sucedido en los últimos 20 años? (O sea, de las mismas y de lo mismo, que somos hombres y, como tal, limitados)
Por supuesto la historia del fax seguía dando juego. En esta foto os muestro el equipamiento informático de Guillermo y Pedro.

Con el Postre tomamos "unos bombones" que había traido de Amsterdam. A Juan no le sentaron muy bien. Despues de lo que me pasó con los Indios allí....¿Será contagioso?
Queríamos tomar café. Salimos del Txoko. Podíamos haberlo tomado allí, no sé a qué se debió. Nos fuimos al Areso. Decían que habían apagado la cafetera. Once elementos saliendo de un txoko. El dueño, hombre inteligente, encendió la cafetera cagando melodias, que se dice.

A la salida del café, primera estampida. Joseba que había quedado con su mujer en que iba a dormir...¡A Tolosa! Eso está casi cerca de Londres, o así. La verdad, esa educación represiva de que todo placer tiene su castigo, a alguno no se le ha ido, con 40.

Y saliendo de allí a por las copas, Juan tuvo que irse al hotel. Los bombones....seguro

Ni sé cuantas copas cayeron.Más de las recomendables. (Veis en las fotos que Rafa se divertía un huevo y no bostezaba, ni nada....)

El bar, petado de gente. En una proporción varón-hembra de 15 a 1, más o menos. Se me ocurrió que sería buena idea hacer una caravana de mujeres pero, despues de la experiencia de antes de cenar, deja, deja....
Lo que nos reimos no se puede explicar. Serían las 6 cuando nos retiramos a nuestros aposentos.

Dormimos poco. Para mantener el nivel de sangre en alcohol desayuné un bocadillo con un vasito de vino, como en los viejos tiempos. (Eso de meterme un bocata de jamón con un café, como que no me entra)

Mis amigos son vascos, creo que ya lo he dicho. Como tales son cortos de palabras, aunque de hechos largos, muy largos. No espereis comentarios suyos en este blog. A lo más, alguno...es posible que me mande un fax

jueves, 20 de noviembre de 2008

¡QUE PROBLEMA PARA ELEGIR UN RESTAURANTE!

Así como a mí me invitan muchas veces a comer fuera, yo tambien lo he de hacer con cierta regularidad en Madrid. Tengo mis clásicos, allá donde generalmente nunca fallas. El Asador de Aranda, cordero y productos del cerdo, Casa Patas, flamenco, Casa Botín, histórico.

Generalmente tengo éxito con casi todos mis clientes. Suelen ser apuestas seguras. Sin embargo, hay un grupo de clientes con los que he de andar con pies de plomo, y son los judíos.

Alguno me puede decir, ¿Y los árabes?. Bueno, los árabes o de religión musulmana, con tener un poco de cuidado con el cerdo ya cumples. Pescado, ensaladas, cordero...

Entre Hebreos, como en botica, hay de todo.Y así como voy con mi amigo Yaron, casado con una judía ortodoxa a cenar al Asador de Aranda, y nos ponemos de morcilla, chorizo y jamón hasta las patas, hay otras personas que nunca sabes por donde van a salir.

A propósito, mi amigo Yaron y yo, solemos intercambiarnos botellas de vino israelí y español, todos los años en Amsterdam. Generalmente le llevo un paquete de jamón envasado al vacío para que le dé tiempo a comérselo en esos 3 ó 4 días, y que no quede ni rastro al llegar a casa (Tirar el jamón creo que Yarón lo consideraría un auténtico pecado, y no comerlo)

Conozco otro judío, de Filadelfia éste, que al cumplir 18 años, su hermano quiso tener un detalle "de hombres" con él. Le propuso llevarle a un club de vida alegre. El tenía otra curiosidad. Probar la Langosta. Cuando la probó exclamó que ya entendía por qué era pecado comerla. (Y eso que, según me confesó, era del Maine. Prueba la gallega y se convierte directamente)

Sin embargo, a mi me ha tocado lidiar con situaciones con invitados judios cercanas a Kafka.

Recuerdo un proveedor que tenía que hacer una instalación en Telefónica bastante importante. Los viernes salía de allí a las 12,30 del mediodía, con el fin de que le diese tiempo a llegar al hotel antes del comienzo del Sabbath porque sino, no podría utilizar el ascensor para subir a la habitación.

Creo que éste no ha comido conmigo en las 10 ó 15 veces que hemos podido comer juntos, otra cosa que tomate, lechuga y coca cola.

Un compañero suyo pidió una ensalada verde. Como gracia le pusieron 4 virutas de atún encima de 3 hojas de lechuga. Ni la probó (Eso sí, mostrando ademán de disgusto. Ser incomprendido)

Algún otro pidió lenguado, recuerdo, y le pusieron 4 colas de gamba encima. Este fue más fino, las apartó y, con cuidado de no probar donde habían estado posadas las colas, dió buena cuenta.

Yo considero que estos temas alimenticio-religiosos, vienen del sentido común y de la higiene de donde se originaron esas religiones. Antiguamente el cerdo traía enfermedades como la triquinosis. Una manera de eliminar la propagación de la enfermedad era prohibiendo su ingesta.

Los católicos, los viernes de cuaresma no pueden tomar carne porque, antiguamente, la carne era un artículo de lujo. Si esta medida se aplica, y nos ponemos morados esos viernes de marisco, efectivamente, estamos realizando un sacrificio casi sobrehumano.

Por ello, respetando todas las creencias, considero que hay que ser flexibe y tolerante en esto, como en la vida, y en vez de asumir literalmente las normas, quedarnos con el espíritu de las mismas.

Pero bueno, cuantos menos coman jamón, por un sencillo proceso de oferta y demanda, más barato será. No insistiré mucho en este tema.

¡Buen Provecho!

sábado, 15 de noviembre de 2008

UN PASEO POR EL BARRIO DE LA CANDELARIA, BOGOTA

Sé que me disculpais los dos o tres lectores fieles que tengo por mi poca producción ultimamente. La verdad es que de trabajo ando hasta arriba, y en casa, bueno, procuro estar más presente de lo que he estado hasta ahora. Eso me quita tiempo para ponerme a pensar en nuevas historias. Si además, escribo del tirón sin corregir...pues las musas han de estar despiertas.

23 y el Jevy, que se han brindado a mantenerme el blog con sus historias, desaparecidos en combate, o sea que, como dice mi suegro...mucho trilirili pero poco tralarala.

El domingo pasado tenía el avión de Bogotá casi de noche, lo que me daba mucho tiempo para darme un paseo por uno de los Barrios más bonitos que conozco. Barrios de La Candelaria, aparte de en las Islas Canarias, conozco unos cuantos. Sin ir más lejos, este mismo viaje, en Caracas, me metieron una leche en un restaurante de La Candelaria de Caracas para estudiar detenidamente. Sin embargo, el Barrio de La Candelaria de Bogotá merece mención especial.

Nosotros le diríamos "El Centro" o "Lo viejo". Es donde Santa Fé de Bogotá fue fundada. Al pie del Cerro de Monserrate y del de Guadalupe (Más de 3000 metros de cerro, oiga, que aquí parecen tambien de Bilbao)

Lo primero que hice fue dirigirme al Museo del Oro. Al lado de donde están los esmeralderos haciendo sus negocios. Llegué en el Transmilenio, un autobus con carril específico que, dependiendo de la hora y los "trancones" como dicen por allá, es el método más rápido para moverse. La verdad es que hace falta más que un título de Ingenieria para saber moverse por el mismo pero, conseguí llegar.

El Museo lo acaban de reabrir y remodelar y está espectacular. Ahí nos damos cuenta de la evolución de muchas civilizaciones antes de que llegaran los españoles. Los Colombianos, al contrario que los Mexicanos, nos daban a los españoles un pelín de cuartelillo explicando en los paneles informativos que los españoles llevábamos 700 años en Guerra contra los árabes ,y contra nosotros mismos (Esto es de mi cosecha), y que no tenía mucho sentido que nos comportáramos de otro modo muy diferente a como lo hicimos. (Gracias por lo que les toca a sus tatarabuelos, señores colombianos). La verdad, era la primera vez que captaba este razonamiento y me parece, como mínimo, digno de tener en cuenta.

Sí que queda claro que llegamos a llevarnos su oro, y que nos daba igual según que cosas. Por otra parte, lo mismo que les ocurría a los indios con sus tribus enemigas o a los ingleses con sus piratas. Y, de verdad, no me hagais sentir patriotero que es un acto de absoluta justicia histórica.

Justo despues del museo, me dirigí enfrente al museo de la Esmeralda. En el piso veintitantos de la Torre Avianca, justo enfrente del Museo del Oro.
Este Museo, privado, cuesta unos 4 € mientras el del Oro, menuda diferencia oiga, no llega a 80 cms.

Se trata de una galeria minera donde te explican las diferentes clases de esmeraldas, como las extraen, tienen un fondo bonito. En fín, que ya iba de minerales servidito.

De ahí me dirigí a la Plaza Bolivar. Que maravilla de Plaza. Todavía no entiendo el engendro que han hecho con el Palacio de Justicia, emplazamiento que fue ocupado por el M19 hace 20 años más o menos, y que el Ejército no dejó piedra sobre piedra. En este emplazamiento, ese cubo modernista, en fín, no investigaré de quien era primo el arquitecto, porque eso sí que es un crimen contra la humanidad.

Pasear por este rincón de Bogotá un domingo por la mañana es una de las experiencias más gratas que uno puede tener. Me tomé un vaso de arroz con leche de un cutrelocal que me recordó al de mi madre. Además, y es extraño en esta ciudad, el tiempo acompañaba. Que tranquilidad paseando por esta zona. El Museo de la Moneda, la Iglesia de Santa Clara....

Se me hicieron las 3 de la tarde en un suspiro...al hotel...maleta y aeropuerto.

Echaré de menos este rincón y su gente

¡Hasta pronto!

lunes, 10 de noviembre de 2008

ANDRES CARNE DE RES o AL CURA LE TOCARON EL CULO

Como os comentaba, fui a cenar a Andres Carne de Res. Un sitio famoso en toda Colombia ¿Como explicar en qué consiste este local? Lo voy a intentar pero, casi mejor accedeis a su página web porque a mí se me van a pasar un montón de cosas.

El restaurante, bueno, llamar a eso restaurante es una simplificación como otra cualquiera, se encuentra como a 30 kms de Bogotá le calculo yo, y siempre está a reventar. Iba con unos clientes. Venir aquí solo es como ir con una charanga a misa.

Definir el sitio como kitsch no creo que le haga justicia en nada. Un local totalmente caótico, abarrotado de productos sacados de la basura y reciclados, lleeeeeeeno de bombillas de colores, con las mesas y bancos de madera juntos unos al lado de otros.

Era viernes. habíamos tenido que reservar mesa y nos dijeron que la mantenían hasta las 8 de la tarde. Me imaginaba encontrarme algo más pequeño. Menudo despliegue en medio de ninguna parte.

Nos dirigieron a nuestra mesa. Lo primero que hacen al sentarte es decirte donde está la salida de emergencia, tal es el caos reinante. Bueno, una vez que me sentaron fui incapaz de descubrir donde estaba la entrada por la que habíamos ingresado en el local, escaleras arriba y abajo, multitud de niveles diferentes. La camarera que nos iba a atender durante toda la noche, todavía estaba fresca. Su actividad es frenética.

Una de las muchas pistas de baile estaba justo bajando tres escalones. A pesar de estar la pista a reventar, casi todas las mesas bailaban encima de sus bancos corridos. ¡Un espectáculo!

Y de repente apareció un grupo de lo más heterogéneo. Varias chicas y chicos jóvenes, provocando a las diferentes mesas. Ellas vestidas de años 70, un cura, un trompetista (El peor trompetista que he escuchado en mi vida), otros disfraces.

Bajaron a la pista de baile y realizaron un "número" por decir algo. Fue la única foto que les saqué. Cuando acabaron vinieron a nuestra mesa. Al enterarse que era español, me impusieron una banda de visitante especial y una corona (Como a los niños en los Mc Donalds)

¡Parecía Miss Colombia!

Ellos, de graciosos, provocándome, soltando un montón de tacos, especialmente el cura, que la tomó conmigo, supongo que intentando ver hasta donde podía llegar. Enseguida entendió que hasta donde hubiese querido...si hubiese querido.

A medida que pasaba el tiempo el garito se iba poniendo hasta la bandera, y la gente desinhibiéndose más. Los camareros ya era imposible que trabajasen, la gente bailaba en los pasillos, encima de las mesas, de los bancos, en las pistas de baile...

Bailé, sí, bailé. Era imposible no hacerlo y, por supuesto, encima del banco donde nos sentábamos.

Comí una carne deliciosa. Es extraño, porque apuesto a que el local tiene más de 300 mesas. pero todo estaba en su punto.

La música, de todo tipo, colombiana, disco, setentera, en fin, divertido, muy divertido.

Detrás nuestro se sentó una pareja de Mexicanos. Ahí atacaron el asesino de trompetas, cura y demás troupe algunos corridos. El cura ya me había cogido confianza. Empezó a restregar su culo por mi espalda. Yo, que a gracioso no me gana nadie, decidí que ya estaba bien de tragar. Separé mi espalda y le di un pellizco...sí, ahí;
Al cura le dió un espasmo como si estuviese en la silla eléctrica. Al acabar la canción me miró...parecía que aterrado. Le guiñé un ojo

No se volvió a acercar por nuestra mesa en toda la noche...y eso que ganamos.

Fijo que todavía está pensando de la que se libró.

Cuando nos íbamos eran más de las 3 de la mañana, y habíamos entrado a las 8 de la tarde. Casualmente nos íbamos a cruzar con el cura. Repentinamente se dió cuenta de que se le había debido olvidar algo en otra mesa. Desapareció....

Lástima, le hubiese dado el número de mi.....zapato

Es lo que pasa cuando me tocan los huevos....que puedo tocar el culo

viernes, 7 de noviembre de 2008

COLOMBIA, EL PAIS DE LA CORTESIA

Colombia es una de mis debilidades. Me encanta venir aquí y hablar con la gente. No solo porque es el español más rico y puro que conozco (Ya he comentado en alguna ocasión, que coges, perdón, un agricultor de aquí y parece un licenciado en Hispánicas por Salamanca. Disculpad, ya les gustaría a muchos licenciados en Hispánicas hablar como un agricultor de Colombia), el acento es dulce...delicioso.

Pero es que además es la gente más gentil y amable que os podais imaginar. Es más, hasta hace gracia cuando se enfadan. Ayer un taxista se le cruzó al nuestro no más de 15 cms. Nuestro conductor le miró y él miró a nuestro chófer. Siguieron los dos por su camino. Nuestro conductor se comenzó a quejar de que "se le había puesto bravo" Jajaja, yo que soy la persona más tranquila del mundo conduciendo, me debo de "poner bravo" 100 ó 150 veces al día.

Para alguien que viene de España, lo que contaré ahora sonará a ciencia ficción. ¡Pero es real! Hoy otro taxista nos ha cedido el paso de la manera más natural del mundo en una incorporación. Vamos, ese tío viene a Madrid y le quitan la licencia por blando.

Las presentaciones en las reuniones son un tanto agotadoras, para qué vamos a engañarnos:

"Buenos días, ¿Cómo le va?"

"Muy bien ¿y a usted?"

"Muy bien gracias, no me puedo quejar. La veo lindísima esta mañana"

"Usted que me mira con buenos ojos".... y así hasta el infinito

Los camareros en Colombia son de lo más amable y servicial que os podais imaginar. Pero no serviciales aduladores. Les sale tan natural que es una delicia. Y da lo mismo que sea hombre o mujer, jóven o mayor.

Sin embargo, es este un país tremendamente clasista. Por ejemplo, como es mi caso, si en un hotel no das toooodo lo que llevas a uno de los 5 botones que vienen a servirte, quiere decir que, por mucho estatus que aparentes, no tienes tanto. Alguien realmente importante no puede llevar peso.

Esta noche ceno en "Andrés carne de Res" Un restaurante tipiquísimo y super conocido. Ya os contaré porque todo el mundo me dijo que es una auténtica experiencia.

domingo, 2 de noviembre de 2008

¡¡¡SOCORROOOOOO!!! LAS AZAFATAS DE IBERIA ATACAN DE NUEVO

Joder ¡Menudo viajecito!

Me dejaba Carmen en el Aeropuerto a las 10 de la mañana, poco más o menos. En la cola de facturación, inmensa, me encuentro con una compañera de un curro anterior, que estaba acompañando a su padre que se iba a Lima. El Aeropuerto parecía, esta mañana de domingo, un campo de batalla.

Era una persona con la que me llevaba bastante bien y, después de la cola, nos hemos tomado un café. (El papi no, porque, una vez facturado, se creía que, el avión, se iba a ir sin él) Ahí nos hemos puesto al día de los conocidos comunes entre risas.

Hoy parece que, excepto por eso, todo me ha salido mal. He tomado las colas más lentas que Murphy me podía haber aconsejado. (Ya sabéis, la tercera ley de Murphy dice que la otra cola siempre va más rápido).

En el control de seguridad, no sólo casi me han desnudado sino que, en un trolley llevaba 3 equipos electrónicos de demostración. Me han hecho desempaquetarlos y explicarles para qué servían. Claro, cuando al pavo de la compañía de seguridad le he empezado a hablar de radiofrecuencia y comunicaciones IP se me ha quedado mirando y ha exclamado, “¡Joder con los avances de la técnica!”, eso sí, después de hacerme abrir todos los bultos. Me he cagado en su leche en cuatro idiomas, porque lo mismo le podía haber dicho sin abrir nada. Para colmo luego, con los pantalones casi por las rodillas han pretendido que me fuese a otro lado con las 6 bandejas que tenía (3 equipos, el PC, la maleta del pc y el trolley). Le he soltado un bufido a la que me lo ha “sugerido” que me he quedado ahí poniéndome el cinturón, el reloj, empaquetando, etc, etc, mientras la otra ha preferido no insistir ante mi cara de mala leche.

La amable funcionaria del Cuerpo Nacional de Policía hoy tenía el día cachondo porque se ha entretenido con todo el mundo. A mí me ha pretendido dar conversación, mientras el resto de colas avanzaban raudas. Que qué escuchaba en el MP3, “música, señora o señorita”, que a dónde iba, “a Colombia, como muestra la tarjeta de embarque”, que si viajaba allí a menudo, “eche un vistazo al pasaporte, yo he perdido la cuenta”

No es que pretendiese ser borde, pero había una cola del copón de la Baraja, y ella como si estuviese de campo y playa. Voy a escribir una sugerencia a AENA. En el control de pasaportes de salida de la T4, el edificio satélite, si ponen colas separadas para personal comunitario y foráneo, todo irá mejor porque, si vas con un poco de prisa y te toca un Nigeriano en tu cola, puedes echar el día hasta que se convencen de que ¡se está yendo, no entrando!

Los cuartos de baño, hoy, no sé si por ser domingo, como después de una visita de los Ultrasur al Camp Nou. (Que me da lo mismo los Boixos por Madrid, no me vayais a banear el blog que hoy es lo único que me falta).

Y ya, la “refinitiva”. Me dan un bonito pasillo y se me sienta al lado una colombianita, 20 años. ¡Menudo viajecito! Me ha explicado toda su vida y milagros. Le daba lo mismo mi lenguaje corporal. Haciendo mi previsión de ventas en el PC, el resúmen mensual, poniéndome el MP3. Menuda capacidad dialéctica. 6 horas seguidas sin parar de hablarme. Y como me da pudor que piensen que soy un estirado, mientras intentaba seguir trabajando, cada 20 ó 25 segundos, un oportuno “aja” o “sí”, que denotase que no me había muerto. Y eso era gasolina pura para ella que tomaba fuerzas.

Los pasajeros de la fila de adelante y los de al lado me miraban con cara de conmiseración y de acompañarme en el sentimiento. De verdad, una auténtica ametralladora verbal.

Los libros que sabéis que estoy leyendo actualmente, dicen que las mujeres no es que sean charlatanas, es que tienen más desarrollada la capacidad expresiva. Joder, esta había acumulado la capacidad expresiva de varias generaciones.

Y, por supuesto, mi habitual rifirrafe con las “amables” aeromozas de Iberia (Que de mozas, la verdad, lo que yo de galán). La verdad es que su comportamiento, o es aprendido en el periodo de formación, o es contagioso ¡Si es que se libra una de cada 570!

Ante un periódico abandonado al lado del snack en cola:

-“Perdón, ¿puedo tomar el periódico?”

Después de un momento de duda….

-“No, es de un compañero”

-“¿Es de un compañero o era para el pasaje?”

Más momentos de duda….

-“Es que suponía que ustedes estaban trabajando. A mí, mientras trabajo no me permiten leer el periódico”

Cara de irse cabreando por momentos…

-“Y si además yo he pagado un billete, su compañero está trabajando, y puede ser del pasaje….”
Se acaba el intercambio de opiniones cuando la amable “servidora” coge el periódico y lo mete en un armario.

¡Como las odio! Muy bien lo tiene que hacer los gestores de Iberia para que con este personal y este servicio, esta compañía gane pasta.

¿Por qué a Latinoamérica no se podrá volar con Lufthansa? Así no tendríamos que aguantar que estas prepotentes nos perdonen la vida en cada vuelo (Por supuesto, solo a los de “Chusmy class”)

Bueno, llego a Bogotá, lloviendo. Mañana, a las 7 tomo un avión a Caracas. Espero que me toque al lado un pasajero, varón y adusto. Otras dos horas al mismo ritmo acaban conmigo.