martes, 12 de agosto de 2008

AUCKLAND, O LA CIUDAD DE LAS VELAS. FIN DEL VIAJE

Nos levantamos temprano. Limpiamos lo poco que habíamos ensuciado, cerramos, y tomamos camino de Auckland que, a pesar de estar solo a unos 320 kms, era un trayecto largo.

Queríamos llegar prontito a Auckland para poder disfrutar aunque solo fueran unas horas. Tampoco perdíamos mucho. Este era un viaje de naturaleza y emotivo. Ver una ciudad más o menos, no es que tuviese demasiada importancia, pero bueno, siempre es mejor hacerte una idea.

Nos alojamos en el mismo hotel que el domingo anterior. Estaba muy bien. Auckland no es Los Angeles y puede recorrerse con tranquilidad a pie. A Auckland le llaman la Ciudad de las Velas. Tiene más de un millón de habitantes y unos cien mil veleros, lo que hace un velero por cada 11 habitantes. ¿A ver donde veis eso?

Preguntamos, con esa escasez de tiempo, qué debíamos hacer. Indudablemente subirnos al Skycity, una torre de 328 metros de altura, y contemplar la ciudad.

Si alguien me pregunta, en Nueva Zelanda, aparte del vino, qué es caro, indudablemente las entradas a cualquier sitio. Yo creo que nos habremos gastado entre los dos, y sin exagerar, unos 1200 € en acceder a cualquier sitio. Los 30 € por cabeza te caen para entrar a la colección de posavasos que tiene cualquier gañán en un pueblo perdido, y te quedas tan ancho. Y, o entras...o no entras y entonces te los gastas en vino. Es una solución de compromiso, que decíamos en la Universidad. Si estás hasta las narices de posavasos, vino, y si no, posavasos.

Auckland no era una excepción, y la galleta (Joder, qué educado me estoy volviendo desde que me han dicho que me leen niños) que nos metieron por entrar fue notable aunque, en honor a la verdad, en relación calidad-precio con los posavasos, resultaba ventajoso.

A la entrada a la torre vimos a gente con monos naranja y con monos azules. Sabíamos que desde lo alto de la torre la gente se tiraba. Supusimos, que dependiendo del nivel de descerebramiento (O de altura desde la que se tiraban) el mono sería uno u otro porque, obviamente, no tenían el mismo precio. Nuestro error era mayúsculo.

Por supuesto, podías subir a la altura que quisieses, era un cuestión de pasta. Nosotros, y dado que yo he vivido muchos años cerca de Bilbao, lo expresé claro ¡Sin tasa! que decía mi amigo Iosu Zulueta cuando invitaba. O sea, que la mayor leche, y la mayor altura. Nos dijeron que muy bien, que así podíamos ver a la gente que se tiraba mucho mejor (Están locos estos Kiwis, que diría Obelix)

Las vistas desde lo alto eran impresionantes. Podías visitar toda la corona de la torre. ¡Una pasada! y ahí observamos una fila de gente de azul y una fila de gente de naranja. Era extraño, un par de pisos por debajo nuestro, pero ambos a la misma altura. ¿Cual era el truco? En seguida lo descubrimos. Los de azul, se tiraban. Los de naranja, se aproximaban al borde, les hacían una foto, y se volvían a meter para dentro. De todos modos, ni dándome dinero me aproximo al borde colgado de un arnes, como el panoli de arriba, para que me saquen una foto y alguien en internet descubra a tus amistades que es mentira.
Y eso que, para los menos intrépidos, o sea nosotros, tambien teníamos nuestra dosis de adrenalina. Primero, el ascensor que te subía hasta arriba, tenía una ventana en el suelo para que vieses 300 metros hacia abajo. Lo mejor no era eso, porque veías solo la caja del ascensor. Lo mejor era que en lo alto de la torre, había, convenientemente dispuestas, unas ventanas en el suelo para que vieses el vacío. Me puse encima de una, y ni leyendo que el cristal tenía 34 mms y estaba a prueba de no se qué se me fue el canguelo. Agarrado a una barandilla, me hice una foto y salí escapado. (Como si la barandilla fuese a sujetarme si se rompe el cristal). La foto que veis arriba es la única que hay de Carmen en el blog (En realidad de los pies de Carmen, y espero que no se moleste mucho ;-) )

Auckland se extiende a lo largo de un itsmo volcánico limitado por dos puertos. La zona de uno de los dos puertos es la zona de marcha de la ciudad. Muy parecido a la zona del puerto de Barcelona. Gente bien, y profesionales en busca de un rato de diversión. Era viernes tarde, o sea que, mucha gente. Habíamos leido un reportaje de la revista de las líneas aéreas QUANTAS. Nos apetecía pegarnos un homenaje. Eran nuestras bodas de hojalata, o como se llamen, 15 años. Y nos queríamos meter una mariscada en condiciones. (Y un poco de vino, por favor, para que no suba mucho la cuenta ;-) )

Nos dirigimos a un sitio de marisco que recomendaban muy fervientemente. Un paseito. ¡Y tan recomendable! ¡La lonja de pescado! Ya sabíamos que era la lonja pero, decía que había un buen restaurante. No lo encontramos con lo que, cogimos nuestra guía, vimos el mejor restaurante de marisco y a no dar más paseos en balde. ¡Y estaba al lado de donde habíamos salido para darnos el paseito de 45 minutos hasta la lonja!

Mereció la pena. Camareros de ese tipo que parece que si les hablas en alto les asustas la clientela. Vamos, que siendo camareros, y perdón a los camareros que en el mundo han sido, te miran por encima del hombro si no vas de Armani. Pues ahí quería yo gastarme la pasta.

Entramos y tampoco era para echarnos a la calle. Un par de mesas de chinos, con pasta, si, pero nada del otro jueves. Decidí que sin corbata no desentonaba. ¡Y pedimos la bandeja hiper mega especial! La verdad es que nos pusimos hasta arriba.

No creo que vuelva a celebrar un aniversario tan lejos, pero fue muy agradable. De vuelta al hotel tuvimos los 30 minutos para comprar los recuerdos para la familia política (A ver como les cuentas que te has tirado 15 días por ahí y no te ha dado tiempo de comprar nada) En mi casa eso no se estila.

Pues era cierto. habíamos estado dedicados a ver un montón de cosas maravillosas y, la verdad, las tiendas de recuerdos las habíamos pasado de largo. Menos mal que, a última hora, tambien hicimos los deberes

21 comentarios:

Unknown dijo...

Vaya, al ver la foto del "mono naranja" me preparé para leer el capítulo más intrépido. ;-)

Kikas dijo...

Querido Argos;
¿No te quedó claro mi nivel de cagalera al leer la entrada de Queenstown? ¿O es que me lees aleatoriamente y pierdes entradas decisivas para entender las siguientes?
Vaya, en todo caso, a lo mejor soy capaz de dar el pego....

Luis Medina-Montoya Hellgren dijo...

A ver, a ver...
Cómo que se tiran??
Son suicidas uniformados y ordenados? Se tiran con paracaídas? Hacen jumping???
Aclara bien la cosa que igual hemos encontrado una utilidad para el Faro de Moncloa.

Kikas dijo...

El faro de Moncloa, si estuviese en Bilbao, nos valdría, que ya sabes que allí los metros, son estereo (O sea, valen por dos). Estando en la Ciudad Universitaria de Madrid, sabes, aquí somos más prosaicos y menos espectaculares.
Sí, hacen lo que nosotros llamamos puenting, y ellos (Y además tú, por supuesto)jumping. Aunque si tienes cualquier otra idea que sea suficientemente descerebrada, creo que, con proponerlo, te ayudan a montar una empresa para sacarle rendimiento económico, que clientes, no van a faltar (Parapente, vuelo sin motor, salto dentro de pelota de caucho, ver quien se come más huevos duros antes de estrellarse contra el suelo, etc).
Por cierto, es un placer leerte de nuevo desde suelo patrio (glups, perdón por decir pilila)

Unknown dijo...

Kikas, está feo eso de intentar leer la cartilla a tus lectores, y además contradice alguna de las ideas que predicas.

Y en mi caso además no corresponde, soy fan incondicional del blog y de sus comentarios. Tendré que pensarme si me paso al bando de los ofendidos, cuánta ingratitud. :-)

En realidad en la entrada de Queenstown me mordí un poco la lengua, adrenalina seguro, peligroso... teniendo en cuenta que se trata de aventuras organizadas... bueno, siempre depende de la competencia y habilidad de los pilotos. Aceptamos barco.

Aún así, sigo con la intriga, puedes comer monos casi vivos y luego te asusta un mono naranja ;-)

Kikas dijo...

Querido, si no, estimado Argos;
No es mi intención leer la cartilla a ninguno de mis sufridos visitantes.
Es precisamente por la fidelidad que demuestras, por lo que me ha extrañado sumamente el desconocimiento que posees de mi nivel de valentía (Va de mucha, disminuyendo proporcionalmente a medida que se acerca el peligro....no sé si me entiendes)
Un mono de butanero no es peligroso en sí mismo...comienza a serlo si el intervalo desde el final de la pernera hasta el suelo supera los 10 cms....cuánto más si son más de 300 metros....no sé si me explico

Anónimo dijo...

Se ve que hay una especie de competición a ver quien la tiene más larga. La torre de comunicaciones, se entiende.

Hace cuatro años tenía Angélique un congreso en Düsseldorf. Como nuestra vida era aún sencilla (sólo teníamos una hija) le acompañamos y mientras ella discutía sobre gestión de proyectos, Celia y yo nos fuimos a hacer turismo.

En Düsseldorf hay una torre de esas (Reinturn se llama) más modesta, donde no sólo puedes ponerte de pie sino que puedes tumbarte bocabajo todo lo largo que eres sobre un cristal y mirar el Parlamento Regional situado 100 metros más abajo. Y te pueden contar que el cristal es la leche de gordo pero se te ponen los huevos de corbata. A mi lado, indiferente a la altura y al supuesto riesgo se sentó mi niña de año y medio. No sé que habría pensado la del congreso si nos hubiese visto.

Al levantarme, una turista española, pensando que yo no le iba a entender le dice a su marido: "Pobre niño (Celia tenía el pelo muy corto, vestía con un mono vaquero y no le hemos puesto pendientes) con ese irresponsable como padre". No le contesté directamente, pero al pasar a su lado camino de nuestra mesa, situada justo enfrente de ellos, dije: "¿Te ha gustado la vista, Celia?". Miré a la señora a los ojos y ella se puso como un tomate. Miró a su marido y poniéndose en pie y dirigiéndose hacia la puerta, le dijo: "Fernando, paga, que nos vamos".

Y Fernando, cabizbajo pagó la cuenta y al pasar a mi lado, suspiró.

¡Pobre Fernando!

Anónimo dijo...

Oye Kikás, tu que eres un hombre de mundo.

Cuando delante de un chino te achinas los ojos, ¿ se ofende o se rie y hace un triángulo con su nariz, el pulgar y el índice?

Es que acabo de descubrir que la canción "Chinito tu, chinita yo" de Los Payasos de la Tele es racista y ofensiva. Y pedir dinero el Domingo Mundial de las Misiones con una hucha en forma de cabeza de negro, ni te digo. Y entonces me doy cuenta de que los que fuimos niños en la época de Franco hemos sido educados en el racismo y la xenofobia.

Y tengo un disgusto de puta madre.

Fin del trolleo.

Kikas dijo...

23, ¿seguro que no estabas en Singapur, él no se llamaba Fernando sino Iñaki, y tu estabas fumando? Voy a tener que cambiar de libro de aventuras que este me parece que toma mal las fuentes (Para los despistados, argos, hay una entrada titulada, "todos somos Iñaki", perdón, argos, por señalarte ;-) )
Y ya sabemos quien la tiene más larga, 23, no hace falta apabullar que te conozco...¡por supuesto los de Bilbao, cuando quieran construirla!
Tus huevos de corbata....ya te he visto cheposillo la última vez que nos vimos ¿Te dolió mucho?
Y ya sabes, la culpa es tuya, por mirar a Maruja a la cara para putear a Fernando.
A propósito, ayer cené con el Marqués, y hablamos mucho de ti. El juego que da este blog. (La verdad, va a dejar de verme porque lo publico todo, ¡Qué cotilla!)

Kikas dijo...

23, por favor, no hagas caso a los periodistas ingleses. ¡Mira que todo te lo tengo que decir! Bueno, ni a los españoles, ni a los italianos ni a.... A ver ¡que no hagas caso a los periodistas, coño!
Fuimos educados en el paternalismo, pero para que el Marqués me sacuda, los yankis e ingleses que hablan del terrible genocidio de la colonización española....¿hablamos de los sioux y de los aborígenes australianos?
Y porque los maorís les daban hasta en el cielo de la boca y les engañaron, que si no....lo mismo.
¿Por qué no te preocupas en analizar la lista de restaurantes en Amsterdam donde invitar a un amigo con una relación calidad precio impresionante en vez de por estas chorradas?

Unknown dijo...

Muchas gracias Kikas, te explicas perfectamente. Aunque no deberías extrañarte de mi desconocimiento sobre tu nivel de valentía.

Y gracias por el apunte de Iñaki.

Leí la entrada, recordarla al dedillo es mucho pedir para alguien cuya memoria está basada en post-it. Si tuviera que hacer un examen da por hecho que lo suspendería, ¿recuerdas que son tus vivencias? Por si acaso, y para no perder detalle, he vuelto a leerla.

Y he de apuntarte, lo siento, que a pesar de las creencias no todos podemos pasar por Iñaki.

Anónimo dijo...

Pues estuve tentado, por hacer la gracia, de rebautizar a Don Fernando por Iñaki, pero no, se llamada Fernando y los tenía colgando. Un poco huevón, ya me entiendes.

No esperes muchos comentarios de mí en los próximos días. Tengo a mis padres de visita y entre eso y que, como estoy haciendo chapuzas en casa acabo rendido, duermo de maravilla.

A ver como hago para poder irme a Amsterdam un par de días. Quizá si convenzo a mi suegra...

Kikas dijo...

Querido Argos;
Lamento decir que no son mis vivencias, que las saco de un libro de aventuras!!!! y malo además.
De todos modos, no es obligatorio saberse las historias ni es materia de examen, tranquil@.
Sí me enfadaré, si vuelves a confundirme con Rambo. No, ese no soy yo, mal que me pese

Kikas dijo...

Coño, si era huevón, a lo mejor era de Tenerife!!! ¿Y qué te crees, que Iñaki no lo era? (Huevón, se entiende...no de Tenerife)
¿Tus padres en Flandes? Serán la sensación de los Montes, cuando vuelvan contando historias de Europa...
Será una pérdida él no poder encontrarte por las mañanas, 23, espero que dure poco
Un abrazo

Unknown dijo...

Es bastante más sensato copiar las aventuras de un libro que vivirlas, porque no será que … ¿pecas de falsa modestia?

Vamos Kikas, quien no ha hecho un poco de “rambo” alguna vez?

328m?, ni tan siquiera los que restan de 300 debía tener la pared de una presa situada por la zona de patones. Eso si, barato, muy barato.

Una cuerda lo suficientemente larga (cielos, y elástica) que alcanzó desde el poste más cercano a la presa y recorría todo el largo.Unos mosquetones y cordino que en manos del “paraca” (el amigo “experto” en aventuras y el único que sabía de qué estaba hablando) se convirtieron en arneses. Y el grupo de amigos que incluía a los novatos inconscientes que rappelamos por la presa.

No fueron 15 minutos, y probablemente tampoco un momento de gloria (para mi si), al menos para los que miraban desde abajo y veían cómo argos (tras saltar para evitar el saliente de la presa no tuvo en cuenta calcular que la cuerda era elástica y que si decides tirarte, te tiras, sin dudas) giraba 180º hasta quedar boca abajo, allí arriba.

Apenas recuerdo si le agradecí lo suficiente a Pedro que nos enseñara con tanta paciencia cómo frenar y que tensara la cuerda desde abajo a tiempo. El resto estaban ocupados mirando.

En realidad una vez que saltas desaparece el miedo propio.

No alcanza el nivel de las aventuras que cuentas pero es original.

Por cierto, ¿te importaría indicar la referencia del libro?

Kikas dijo...

¡Cielo Santo! ¿Rappel en una presa? Te acabas de convertir en mi héroe de aventuras particular. O sea, ¿y si se rompe la presa? ¿Te puedes imaginar el chapuzón? Supongo que irías con el flotador de patito por si acaso, no tragases un poco de agua con la avalancha.
Ahora, me acabo de decepcionar. Yo creía que los paracas se tiraban solo con un paracaidas. Ahora resulta que se tiran con cuerda elástica, arnés y no se qué más. ¡Lo que son los efectos especiales de Hollywood!, ¡Qué engañados nos tienen! (Porque decías que era el único que sabía de lo que hablaba, o ¿estabais en una conferencia y era un Power Point?)
Bueno, yo recuerdo que en el parque de atracciones, y con más de 25 años, me maree en el cine ese que parece que estás montado en no se qué barbaridades, y me tuve que apoyar en una pared con la cara completamente amarilla (Y sin hepatitis), ante la mirada divertida de Carmen que empezaba a conocer el Rambo con el que se iba a casar. O sea, que incluso en conferencia con Power Point, ya te admiro.
¿El libro? Lo siento, los que nos damos importancia no desvelamos nuestras fuentes....

Unknown dijo...

Claro, una presa debería tener agua... aquella no. Pobres los que admiraban desde abajo las piruetas de los que bajaban la pared de la presa, porque allí nadie llevaba flotador.

Power Point? jajajaja, no fue ayer, el boom digital aún estaba por llegar. No sé si alegrarme o no, quizá alguien hubiera tenido a bien inmortalizar aquel momento, lo malo es que andaría corriendo por YouTube... maldita timidez.

¿Y si se rompe la presa?? ¿Crees que a alguien se le ocurrió pensarlo?

No pasa nada Kikas, hay quien es más de práctica y quien es más de teoría, la referencia del libro era por ahorrarte transcribir las aventuras.

Kikas dijo...

Gracias, Argos, por preocuparte por el mal uso de mi tiempo, pero es que me aburro...y así tengo algo en qué entretenerme. Si te facilitase el IBAN del libro, aparte de una pequeña comisión por parte del autor (En este caso Julio Verne, conmigo tonterias las justas)debería buscar otro libro para escribir un blog, no sé, técnica de sevillanas, levantamiento de la cilíndrica de 350 kilos con la izquierda, en fín, algo menos socorrido, en resumen.
Veo que, o bien el trabajo no es muy exigente en estos días de canícula, o bien, no bajas ( o subes) a la piscina o playa, o bien, además del flotador de patito, bajas con el portatil wifeado (menudo palabro)
Es un gusto ejercitar las neuronas de todos modos, en este agosto donde, aunque en España estemos parados, en el resto del mundo siguen dándome de comer, y qué no paren

Unknown dijo...

Lástima, aquí no debe llegar la wifi porque sólo veo marañas de cables.

Tienes razón, el jefe me ha abandonado, y un descansito de vez en cuando no está nada mal. Voy a intentar decidir si voy a reclamar su atención o me bajo un ratito a la playa.

Entiendo tu "secretismo" sobre el libro de aventuras, seguiremos atentos.

Un abrazo.

Kikas dijo...

¿Marañas de cables? ¿Estás enredad@?
Ten cuidado, no bajes a la playa llen@ de cables, no te vaya a dar una descarga, que los cables los carga el diablo.....
De todos modos, estarás conmigo en que no sigo en esto por interés monetario, mal que le pese a 23. Con lo bien que me vendría esa comisioncilla de Julio Verne...

Mela dijo...

Encuentro normal que se llame "la ciudad de las velas" con tanto velero
La torre Skycity debió ser impresionante
Kikas... creo que bodas de hojalata no existen
Son de plata, oro y platino... 25, 50, 75 años respectivamente... van de 25 en 25