Sé que esta entrada me va a traer quebraderos de cabeza. Los oriundos de Miami se van a subir por las paredes y...¿por qué no?, los de Benidorm tambien...
Llegué ayer al pais de los gordos increibles. Esos que se caen de la cama por los dos lados a la vez. No, no me gusta este país, lo siento. Todo hecho para sacar la pasta porque sí, empezando por la propina obligatoria.
Miami, desde el cielo, es como las marismas de Doñana sin flamencos (De los del pico rosa y las patas largas tampoco). Todo es agua. El día que el Artico se deshiele un poco más de la cuenta, aquí nos vamos a reir.
El camino desde el Aeropuerto hasta el hotel, en Miami Beach, se hace rápido, sin atascos. Una vez en el hotel...estando en Miami Beach...uno de playa, como Benidorm
Claro, aquí ver llegar a un pavo con un maletón y ordenador canta que te cagas. "Este viene de tapadera, seguro" supongo que es lo que piensan.
Miami Beach es una franja de tierra que se adentra en el Mar. Poniéndonos patrios, como La Manga.
Lo mejor de todo es que todos te hablan en un delicioso español con acento cubano, no como en Benidorm que, dependiendo donde te dejes caer no escuchas otra cosa que inglés.
La ventana de mi habitación da al mar. Un mar inmenso, azul.
La primera en la frente. He hecho 10.000 kms para tener una reunión, y nada más llegar me encuentro un correo que me la cancelan...para que luego digan de la seriedad gringa. Tiro de teléfono, lloro adecuadamente, al final se jode...nos reunimos...la semana que viene en Panamá...el que viaja ahora es él.
Mi vuelo ha durado 10 horas más la espera. 10 horas de correos electrónicos de gente histérica porque su petición es de vida o muerte. A las 5 de la tarde, hora local, me pongo a contestar en vez de irme a dar un paseo. No acabo hasta las 9, donde me indican que para cenar y ver gente he de ir a Lincoln Road.
Me atrevo a tomar el bus. 2 $, pero es un deporte de riesgo. No pidas billete para la nota de gastos. No hay. Si el bus se da una castaña, el seguro idemnizará a los que pagamos y a los que se colaron o...me da que no pagará a nadie.
Lincoln Road es una zona peatonal llena de tiendas y restaurantes. Yo quería ir a La Pequeña Habana. La recepcionista del hotel, cubana, me dijo que a qué iba ahí, si ahí no había nada. Lincoln Road, me dice...debe de catalogarme como masa....
Tengo un par de encargos. Mi hija quiere un plumas de una marca rara que solo parece que hay aquí, pero buscar un plumas en Miami no es sencillo, por no decir posible, y desisto.
Carmen quiere unas gafas. En Lincoln Road los precios son como en Madrid. Para eso que las compre allí y se divierte.
Mucho argentino en Miami. De esos que dejan que las facturas las paguen los pobres, porque ellos sacaron toda la plata del pais antes. Argentinos y de cualquier lado, hablando todos los acentos en español que os podais imaginar.
Es curiosa la pareja prototípica gringa. O bien esos dos gordos imposibles que necesitan dos camas de matrimonio para dormir, o bien el gordo con la Barbie de menos de 40 kilos, que parece que se va a romper a la mínima.
El desayuno incluido en mi hotel es patético. Eso sí, para variar, los desechos son industriales. Dispensadores de platos de papel, de vasos, de cubiertos de plástico...cada desayuno acaba con kilo y medio de material desechable. Lo único que hay son dulces rellenos de chocolate de a 15.000 calorias cada porción. Si quieres una tortilla o un zumo, una pieza de fruta...empieza a rascarte el bolsillo. Este es el mismo pais del no fumar, de la comida macrobiótica y del agua de las montañas del Himalaya. Que hay que comer saludable...y caro. Si quieres comer barato...la basura es baratísima...y las raciones grandes
Y el personal es feliz en ese paraiso de plástico donde todo está tasado y es de cartón piedra. Ese paraiso de los pobres donde, a cambio de los ahorros de todo un año les dejan tomar el sol en Florida una semana, mientras sacan fotos para enseñar al vecindario.
Me voy al Aeropuerto. En un restaurante, la cajera, una cubana, me da las vueltas y me dice "toma mi amol". Soy un caballero español. La nuez me sube y me baja. Fuera no me lo dice, que me conozco. No necesariamente en la calle, en el pasillo mismo, sin el parapeto del mostrador...
Me estoy yendo a Curaçao. Es divertido oir hablar holandés a un camarero negro, y no español como en Amsterdam...
13 comentarios:
Jojojojo.
El título te ha quedado antológico.
Tengo alma de periodista...
No iba a ser nadie sacando titulares, jejeej
Tambien podía haber dicho Marbella, pero allí es que voy menos
;-)
Ya sabes, cualquier parecido con la realidad, mera coincidencia ;-)
Pero menudas quilometradas te metes p'al cuerpo. Miami no me atrae pero Curaçao tiene que ser un lugar curioso. Espero con ansia la crónica curacasea
Salu2
Jejeje, no sé si me va a dar tiempo, Juan Carlos
Llegué ayer a las 20, 30...Me voy hoy a las 19,00
Esto lo trufas de tres reuniones, una cena de un pescado que saltaba (pero cuyo cocinero habría sido decapitado en la Revolución francesa, seguro), un palo de agua a mitad de la cena que hizo que todos nos tuviésemos que guarecer bajo un techado (Pez y todo) y oyendo hablar en holandés...y casi te lo he contado todo, jejeej
Vere qué puedo hacer
;-)
Después de darle ese soberano repaso a Miami, me sorprende que hayas te hayas dejado el aeropuerto.
El aeropuerto de Miami me pareció una ciudad, una auténtica locura.
Desde Miami con amor... :):)
Jejeje, Javier, ahora trabajo en el gremio...
¿Tú quieres verme otra vez buscando curro?
De todos modos, para Aeropuertos Monstruo, despues de Singapur ya me impresionan pocas cosas, jejej
Y si lo que quieres son locuras...te espero mañana en el Eldorado de Bogotá, o en algún chino que recuerdo.
Eso sí que es estres, jejeje
A mi, si pasas por México, me traes narcocorridos... que me ponen mucho ;-)
Muy anónima
Qué buena crónica de Miami. Seguro que no he de ir
Pero que putadas te hacen con las cancelaciones de las reuniones...
Muy anónima...Cómo me da que eres la desaparecida pareja de 23, BdJ (Pareja lo digo por desaparecida)
En este blog, aunque tonterias de corrección política tengamos pocas, somos absolutamente beligerantes con la droga.
No paso por México. Si pasase, te traería Norteñas...es lo mismo...pero no se llama igual
No sé si me entiendes...
Santiago...jejej, no sé si es buena...es mi descripción
A lo mejor no vas porque prefieres que te hablen en inglés ;-)
Lo de las reuniones...en el pecado lleva la penitencia...se hace un viajecito a Panamá el martes que viene. QSJ (Contracción de que se jod...)
Un abrazo desde Lima
Hay una ligera diferencia, son más "jevis":
Me dejaron baleado
tambien me dieron por muerto
ahorita los ando buscando
les voy arrancar los sesos
kema de casquillo ardiente
...
granadas perchera y cuernos
un dedo esperando pulso
en la otra agarra una radio
en su tono refleja
que el otro esta suplicando
pa que vean lo que se siente
cuando a mi me torturaron
Los instrumentos y el estilo son los mismos.
Un beso y desaparezco :-)
Anónima, no me metas al Jevi en esto, que tambien anda tranquilo y desaparecido
Me pondré serio...Colombia hizo sus deberes y botó la gran mayoría de los cárteles, que se establecieron en Mexico (Dónde mejor que al lado del principal mercado, que aquí nos ponemos exquisitos con los productores y no con los que lo compran)
Mexico tiene un problema añadido. La corrupción en la Policia es tal, que para solucionar este tema van a tener que utilizar la imaginación.
Ni se te ocurra que la próxima vez que vaya a México compro una de esas...te la bajas de internet, a ver si hay suerte y los de la brigada de delitos telemáticos pillan tu IP...Me encantaría saber qué explicación les das cuando te descubran esos dos gramos, jejeje
Kikas, después de leer esta entrada te puedo asegurar que yo no te voy a traer quebraderos de cabeza, ni me voy a subir por las paredes
No soy oriunda de Miami ;-)
Un beso
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